Mostrando entradas con la etiqueta ahogados. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ahogados. Mostrar todas las entradas

domingo, 28 de junio de 2020

340. LA DESAPARICIÓN DE UN PUEBLO: DAYMÚS

340. LA DESAPARICIÓN DE UN PUEBLO: DAYMÚS (SIGLO XV. VELILLA DE CINCA)

En el monte de San Valero, entre los actuales Miralsot y Velilla de Cinca, en la orilla derecha de este río, alzaba sus casas el pueblo de Daymús. Sus laboriosos habitantes, dedicados fundamentalmente a la agricultura y amantes de las tradiciones religiosas, acostumbraban a asistir a las romerías de la comarca, entre ellas a la de santa Quiteria.

En efecto, llegado mayo, como todos los años organizaron la comitiva hacia El Pilaret, situado junto a la vía que discurre entre Fraga y Zaidín, para lo que tenían que atravesar el Cinca valiéndose de una barca. La afluencia de vecinos era mayor que nunca, tanto que en Daymús sólo habían quedado unos pocos ancianos y algunos niños.

Los romeros subieron a la barca. Por aprovechar el viaje y ahorrarse una travesía, embarcaron más vecinos de los que la prudencia aconsejaba. En efecto, cuando la embarcación había alcanzado la parte central del Cinca, los remeros perdieron su control hasta terminar naufragando.

La violencia y lo crecido de las aguas, pues era época de deshielo, volcaron la barca quedando atrapados bajo su casco la mayor parte de los pasajeros. De quienes pudieron salir de la trampa y buscaron la orilla pocos la pudieron alcanzar. Todos murieron ahogados. El pueblo de Daymús quedó diezmado tras tan terrible tragedia.

Sin embargo, todavía no habían finalizado ahí las tribulaciones de Daymús y sus gentes, pues poco después se declaró la peste. Los escasos supervivientes de la tragedia del Cinca temieron incluso la desaparición del pueblo. Desesperados, se aclamaron a san Valero, gracias a cuya milagrosa intercesión lograron salvarse.

No obstante, ante la psicosis colectiva que los acontecimientos habían provocado, tomaron una decisión histórica. Por una parte, edificaron junto a Daymús una ermita en honor de san Valero, su salvador, y, por otra, dejaron sus casas buscando un nuevo acomodo. Levantaron de raíz un nuevo poblado, Velilla de Cinca, e hicieron promesa de acudir todos los años a la ermita de san Valero para agradecerle el amparo y la protección prestada, costumbre que siguen cumpliendo sus descendientes.

[Datos proporcionados por Eladio Gros, Félix Montón y Juan A. Sáenz de la Torre. Instituto de Bachillerato de Fraga.]