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domingo, 8 de marzo de 2020

130-139

130.
EXPOSICIÓN DEL APOCALIPSIS DE SAN JUAN. Un volumen en 4.° mayor, en
pergamino, de 550 páginas. Es del siglo XII. No consta el autor.
Aunque no es muy suntuoso este Códice, en su clase es de los que se
escribieron con más gusto, siendo de admirar lo bien conservado que
está no obstante su grande antigüedad. 



Al principio tiene un
prólogo. Después sigue la exposición del Apocalipsis, del modo que
los autores de épocas más recientes acostumbran expositar
los libros de la Sagrada Escritura; esto es, insertando primeramente
uno o más versículos del texto, y poniendo luego la exposición. En
este Códice el texto del Apocalipsis está escrito con bellísimas
letras encarnadas. En el margen se anotan los libros sagrados a que
hacen referencia las citas de la exposición.
Al fin hay una nota
que dice haberse puesto la pena de excomunión al que quitare
este libro (que es de la iglesia de Santa María), o lo poseyere
injustamente por cualquier modo furtivo.
Y concluye con un breve
tratado de San Agustín, que se titula de Córpore et Sanguine
Christi
.

131. RITUAL DE LA IGLESIA DE TORTOSA. Un
volumen en 4.° mayor prolongado, en pergamino, de 234 páginas. Es
del siglo XV. Por razón del objeto a que estaba destinado este
libro, fue escrito en caracteres muy grandes. Además de lo referente
al Sacramento del bautismo, y a otros actos parroquiales, contiene la
consagración de los santos Óleos, el lavatorio del Jueves Santo, la
bendición de las palmas, etc.
También hay otras bendiciones.
Entre ellas está la de cordero de Pascua, que solía practicarse en
algunas casas; la bendición del báculo o bastón
antes de emprender un largo viaje, etc.

132. RICARDO DE SAN
VÍCTOR. TRATADO DEL SUEÑO MÍSTICO DEL REY NABUCODONOSOR.
Un
volumen en 4.° mayor, en pergamino, de 248 páginas. En el primer
folio hay un índice de todos los puntos o materias que comprende
este tratado. El folio segundo donde principia el texto tiene una
sencilla y bonita orla. Los capítulos se indican en el margen con
números romanos, estando las iniciales adornadas con dibujos.

Concluido este tratado sigue otro muy breve exponiendo el sentido
de varios nombres. Y al fin está la exposición de las peticiones de
la oración dominical.

133. PONTIFICAL. Un volumen en 4.°
mayor, en pergamino, de 481 páginas. Es del siglo XIII. Está
escrito con caracteres muy grandes, y adornado con profusión de
dibujos, orlas y viñetas; lo cual se comprende atendido el servicio
que debía prestar este libro, destinado para las funciones
pontificales, como ordenaciones, consagraciones, etc.
Pero lo que
llama la atención principalmente son las orlas de muchas páginas,
así como el gran número de letras iniciales con dibujos; y algunas
viñetas donde compite el capricho con el buen gusto, las cuales a
pesar de su mucha antigüedad conservan perfectamente los colores y
dorados.

134. METAMÓRFOSES DE OVIDIO. Un volumen en
4.° prolongado, en pergamino, de 234 páginas. Es del siglo XII.
Este curioso libro se halla completo, y no obstante el mucho uso que
se conoce haberse hecho del mismo, se conserva en muy buen estado.
Todos los versos de Ovidio están seguidos, sin separación ni
división, si se esceptúa alguna inicial grande que se ve en el
texto, aunque son muy pocas.
Hay un sinnúmero de notas de letra
muy pequeña en el margen y aún entre las líneas. Al final hay una
nota que traducida dice; «Concluye el Metamòrfoses de
Ovidio». Siguen después cinco o seis versos, y luego una nota sobre
el número de versos que contiene este libro.

135. LIBRO DE
LA ANTIGUA LITURGIA DE LA CATEDRAL DE TORTOSA. Un volumen en 4.°
mayor prolongado, en pergamino, de 286 páginas. Es de últimos del
siglo XII o de principios del XIII. Este Códice contiene algunos
cantos con notas de música, que antiguamente solían intercalarse en
el canto litúrgico de la Misa. Indicaremos algunos, traduciéndolos
del latín, para que se pueda formar idea.
Al cantar los Kyries
se intercalaba lo siguiente:
«Sumo Dios, que todo lo crías. Tú,
Cristo, espejo del Padre. Espíritu divino, que procedes de ambos.
Ten piedad de nosotros.»
En la Misa de la Virgen, al Gloria, se
intercalaba esto.
«Primogénito de la Virgen María, que quitas
los pecados del mundo. Ten piedad de nosotros. Tú, que estás a la
diestra del Padre, para gloria de María. Pues que Tú sólo eres
Santo, que santificas a María. Tú sólo eres Señor, que gobiernas
a María. Tú sólo eres Altísimo; que coronas a María.»
Al
Agnus Dei se intercalaba lo que sigue:
«Cordero de Dios, que
quitas los pecados del mundo. A quien recibió María como rocío,
conservando su candor virginal. La planta nos dio una flor en la que
está nuestra salvación. Ten piedad de nosotros.»
Hay
muchísimos cantos, y todos por el estilo; de ahí que este libro sea
curiosísimo. Aunque le faltan algunas hojas al principio y al fin,
lo demás está muy bien conservado. Este Códice es el único de
esta clase
que hay en el archivo, y por ello es más apreciable.

Los cantos están con notas de música escritas con gran
claridad. Hay muchas letras adornadas con dibujos de colores, y
alguna viñeta del estilo de aquel tiempo.

136. BREVIARIO
SEGÚN LA COSTUMBRE DE LA IGLESIA DE TORTOSA. Un volumen en 4.°
mayor, en pergamino, de 410 páginas. Es del siglo XIV. El gran
número de residentes que había en esta catedral en los tiempos
pasados, requiría una buena colección de libros para poder cumplir
con el rezo y canto del coro; así es, que aunque se han perdido
algunos, todavía quedan muchos Códices relativos a la sagrada
liturgia. El que nos ocupa se comprende que es de los que prestaron
más servicio en aquel tiempo.
Le faltan algunas hojas al
principio y al fin; y como los demás de su clase que hemos reseñado,
tiene todas las iniciales de cada párrafo adornadas con dibujos de
colores.

137. SUMA O COMPENDIO DEL DICTAMEN DEL MAESTRO TOMÁS
DE CÁPUA.
Un volumen en 4.° mayor, en cartulina, de 614 páginas.
Es del siglo XV. Este Códice contiene varios informes o dictámenes
relativos al modo de funcionar la Curia Romana en aquel tiempo. Al
principio hay algunos folios en blanco; antes del texto está el
índice. En la segunda página se ve una nota, que traducida dice
refiriéndose a este libro: «Es de la iglesia de Santa María de
Tortosa».
Después del dictamen del expresado autor, sigue otro
de escritor distinto cuyo epígrafe traducido del latín dice:
«Principia la suma del dictamen, compuesta por el Maestro Ricardo
de Pofis
, extractada de los registros de los señores Papas,
Urbano, Clemente, y otros Papas». Y al fin dice así: Concluye la
suma del Maestro Ricardo de Pofis, según el estilo de la
Curia Romana.

138. TRATADO DE GRAMÁTICA LATINA. Un volumen
en 4.° mayor, escrito parte en cartulina y parte en pergamino, de
428 páginas. Es del siglo XV. Este Códice contiene un extenso
tratado de latinidad. No consta quien es el autor. La materia está
bien ordenada, señalándose cada asunto con letras grandes al
principio del párrafo o capítulo. También hay iniciales de
colores. En el margen se ven algunas notas.
Merece notarse en este
libro lo que ya hemos indicado de otros, respecto a estar escritos
parte en cartulina y parte en pergamino. En este se observa que a
cada seis hojas de cartulina siguen dos de pergamino, ignorándose el
motivo de esta distribución tan especial.

139. SAN AGUSTÍN
Y OTROS SANTOS PADRES Y AUTORES.
Un volumen en 4.° mayor, en
pergamino, de 360 páginas. Es del siglo XIII. Contiene un tratado de
San Agustín sobre los Académicos. Y otros breves escritos de San
Jerónimo, San Ambrosio, San Hilario, San Isidoro, San Basilio,
Casiodóro, Orígenes, Boecio, Séneca y otros.
Al principio hay
un índice que expresa los tratados de cada autor, y el folio donde
se hallan; y al fin, o sea en el folio 166, comienza un largo índice
alfabético que termina así: «Explicunt exceptiones ex libris
XXIII trium actorum
.
Después sigue un codlibeto de Alejandro
de Alejandría
, que termina con esta nota que traducimos del
latín: «Concluye el codlibeto del Maestro Alejandro de Alejandría,
de la orden de Frailes menores, que contiene XXI cuestiones, cuyos
títulos están escritos abajo por su orden» Luego se insertan los
títulos.
Por último contiene este Códice las cuestiones del
Maestro Juan de Escocia, de la orden de Frailes menores,
disputadas en París. Tal es el epígrafe que precede a este trabajo.




140-147

83-93

83. DICCIONARIO DE NOMBRES DE LA
SAGRADA ESCRITURA Y DE LA TEOLOGÍA. Un volumen en 4.° en pergamino,
de 242 páginas. Es de últimos del siglo XII o de principios del
XIII. No consta el autor. Aunque el contenido de este Códice está
en forma de diccionario, no hay como en los otros Códices que hemos
reseñado, letras iniciales que indiquen el orden alfabético; de
modo que se ha de conocer por las mismas iniciales del texto, aunque
están bien marcadas y todas son de color. 



Algunas hojas del
principio y del fin se hallan muy deterioradas por la acción del
tiempo, y apenas son legibles. Lo demás del Códice está bien
conservado.




84.
RITUAL DE VARIAS BENDICIONES, Y DE LOS SACRAMENTOS, ETC. Un volumen
en folio, en pergamino, de 151 páginas. Según parece, este libro
debía estar reservado para ciertos actos muy solemnes, pues se
distingue por la magnificencia con que se halla escrito, en
caracteres muy grandes, estando además adornadas las letras del
principio de cada párrafo u oración.
Después de las fórmulas
o preces para bendecir el agua los domingos y
demás días que convenga, está la bendición de la pila
bautismal
, y la administración del Sacramento del Bautismo,
del Matrimonio y de la Extrema-Unción; siendo muy de
notar, que en aquel tiempo el bautismo aún se administraba en
esta iglesia por inmersión.
Al final está el oficio de
difuntos, y el Consueta o explicación de todo lo que debía
practicarse en las exequias de los Sres. Capitulares.


85. LA REGLA DE SAN AGUSTÍN. Un volumen en folio en
pergamino, de 472 páginas. Es del siglo XIV. Como los canónigos de
esta catedral vivían antiguamente según la regla de San Agustín,
este libro debía tener en aquel tiempo mucha importancia. También
contiene la fórmula de la admisión y profesión de
los canónigos, y la exposición de dicha Regla, por
Lorenzo de San Rufo.
Después de esto se halla el
Martirologio que se leía antiguamente en esta catedral, donde
se ven muchas adiciones en el margen, que son de fecha posterior.

Por último hay el Necrológio de los Obispos y Canónigos
de esta iglesia. Pero aunque se titula así, también están
apuntadas las defunciones de algunos sacerdotes y otras
personas bienhechoras de esta catedral, expresándose los
aniversarios que debían celebrarse por sus almas.
Este
repertorio no solamente ofrece mucha curiosidad, sino además es de
grande valor histórico.

86. SAN AGUSTÍN Y RICARDO DE SAN
VÍCTOR. Un volumen en 4.° mayor prolongado, en pergamino, de 512
páginas. Es del siglo XIII. Este Códice que fue foliado en época
más reciente, contiene los siguientes tratados de San Agustín.
Sobre la inmortalidad del alma, hasta el folio 5. De la fé, a Pedro
Diácono, hasta el folio 17; después sigue la exposición del
Símbolo. En el folio 18 comienza el Enchiridion hasta el
folio 33. Del libre alvedrio, hasta el 59. Super Génesi ad
litteram
, los doce libros, hasta el folio 124. De spiritu et
littera
, hasta el 136. Contra los Pelagianos hasta el 153.
De diversas cuestiones, hasta 178. De bono conjugali, hasta el 184. Y
de nuptiis et concupiscentia, ad Valerium Cómitem.
Sigue luego
el tratado de la Trinidad, de Ricardo de San Víctor, que
comprende hasta el folio 229, donde principian los cuatro libros de
San Agustín de Doctrina christiana, hasta el fin.
Se
conoce que este Códice debió utilizarse hasta tiempo muy moderno,
porque además de que la foliación está en números arábigos,
contra la costumbre de las foliaciones antiguas que están en números
romanos, hay algunas notas al margen de letra cursiva, que no
releva (revela) más de un siglo y medio de antigüedad.

Las iniciales de cada uno de los tratados en que se divide este
Códice están adornadas con muy buen gusto.
Antes de comenzar el
texto hay una hoja escrita con caracteres modernos, dando noticias
históricas y críticas sobre dichos libros.

87. SERMONES DEL
PAPA INOCENCIO III. Un volumen en 4.° prolongado, en pergamino, de
140 páginas. Es del siglo XIII. Hay un prólogo con una hermosa
inicial, que comienza así traduciéndolo del latín: «Inocencio
Obispo, Siervo de los Siervos de Dios. Al amado hijo Amaldo,
Abad Cisterciense, salud y Apostólica bendición.

Después del prólogo principian los sermones por las dominicas
de Adviento. También hay algunos panegíricos de
Santos y sermones de varias materias morales.
Los asuntos están señalados con mucha claridad antes de cada sermón
con letras encarnadas.
Al principio de este Códice hay dos
hojas, que por la letra y por su contenido se comprende que debían
ser de algún otro libro.


88. CUESTIONES DE FILOSOFÍA.
Un volumen en 4.°, mayor, en pergamino, de 312 páginas. Es del
siglo XIV. Este Códice no tiene división de materias, ni siquiera
están señaladas las distinciones, como en los otros Códices, con
números en el margen o con letras. Únicamente se conoce la
separación del asunto, en que la letra inicial del párrafo es más
grande y está adornada.
Hay foliación hasta la hoja 120, donde
concluyen las cuestiones de Filosofía. Después sigue un diccionario
muy extenso de los cuatro libros del Maestro de las Sentencias.
Por
lo que se observa en este Códice y en otros, en aquel tiempo era
algo frecuente escribir en un mismo libro obras de dos o más
autores.

89. TRES CODLIBETOS DE FRAY HORVEO NATEL BRITON. Un
volumen en 4,° prolongado, en pergamino, de 138 páginas. Es de
principios del siglo XIV. En la parte superior de la primera página
hay esta inscripción en castellano y en letra moderna:
«Tres Codlibetos del Maestro Horveo, Inglés» Probablemente
este último nombre indica la patria del autor. En las notas que hay
al fin de cada codlibeto nada consta sobre esto, aunque se consignan
algunos datos. Dice así una nota copiada del latín. «Concluye el
primer codlibeto de Fray Horveo Natal Briton, de la orden de
Frailes predicadores. Doctor en Teología» Deo
gratias. En el segundo codlibeto se dice lo mismo. Después del
tercero hay una especie (especio en el original) de índice de
otra época y de diferente letra. Este Códice no está foliado; pero
los codlibetos se señalan con números en la parte superior de cada
página. En el margen hay algunas notas muy antiguas.

90.
REGLA DE SAN AGUSTÍN. Un volumen en 4.°, mayor, en pergamino, de
282 páginas. Es del siglo XII. Este Códice es parecido al del n°
85, aunque es mucho más antiguo. Además de la Regla de San Agustín,
también contiene la exposición de la misma por Lorenzo
de San Rufo
, y el Martirologio. Al fin de este hay
una hoja de un antiguo Calendario; se conoce que las demás hojas
fueron cortadas. Sigue después el Necrológio de los Obispos,
Canónigos, y otras personas bienhechoras de esta
iglesia.
Al principio, o sea en los folios 6 y 7, se halla un
documento muy curioso bajo el punto de vista histórico. Es un
escrito firmado y signado por el Obispo D. Ponce de
Torrella
, y por varios Canónigos y Dignidades de
esta iglesia, el año 1225, estableciendo cuando vivían todos
en comunidad, lo que debía darse en la mesa para comer
según los diversos tiempos del año.
También hay una nota de
letra muy antigua, en la parte superior de la página donde comienza
el Martirologio, que dice así, traduciéndola del latín: «Libro de
Santa María (aludiendo al título de esta catedral) Si alguno lo
quitare, sea anatema.»

91. COFRADÍA DE NUESTRA SEÑORA DE
LA CINTA. Un cuaderno en papel, escrito en letra cursiva.
Es del siglo XVII. No se sabe el motivo de haberse puesto este
cuaderno junto con los Códices antiguos. Aunque forma un volumen,
regular, sólo hay escritas doce hojas. Se comprende que tenía por
objeto anotar todo lo referente a la Cofradía de la Santa Cinta,
y a las funciones religiosas con que se honraba la Sagrada Reliquia.

Principia por un resumen de la Bula del Sumo Pontífice Paulo
V
concediendo varias indulgencias a los Cofrades;
luego siguen por orden alfabético diferentes notas relativas a la
fiesta de la Santa Cinta, gastos de la misma, etc.

92.
CANTORAL PARA LA SEMANA SANTA Y OTRAS FESTIVIDADES. Un volumen en 4°
en pergamino, de 194 páginas. Es de últimos del siglo XIII o de
principios del XIV. Contiene las Letanías de los Santos, y la Misa
para los tres días de las Rogativas que se celebran antes de la
Ascensión. Dicha Misa está con notas de canto llano, así como
algunos Evangelios y la mayor parte de lo que se canta en las
funciones de Semana Santa. También contiene la fórmula antigua de
admitir en la iglesia a los penitentes, o sea a los pecadores
públicos después de haber cumplido la penitencia
canónica que se les había impuesto. Y por último están las
oraciones para la consagración de los Santos Óleos en
el Jueves Santo.

93. Misal. Un volumen en 4° en
pergamino, de 224 páginas. Es del siglo XII. Este Misal es muy
parecido a los de los números 10, 11 y 56. Al principio hay dos
hojas que debían pertenecer a otro libro. La oración de San
Francisco de Asís
está añadida en el margen, de letra
distinta, posterior a la del Misal.
Según la costumbre de los
Misales de aquel tiempo, este también tiene en los dos folios antes
del Cánon, dos figuras, una que representa al Salvador, y otra que
representa a Cristo. Dichas figuras son una verdadera especialidad en
su clase por la rareza de los dibujos.



94-99


120-129




120.
BREVIARIO SEGÚN EL USO DE LA IGLESIA DE TORTOSA. Un volumen en 4.°
en pergamino, de 666 páginas. Es del siglo XIV. así este
Breviario como el del número anterior, se conoce que estaban
destinados por el uso diario de esta catedral, porque además de
contener algunos rezos ú oficios propios de esta iglesia, se dice en
los mismos el número de cantores que en el coro correspondían a
cada festividad.
En el que nos ocupa, después del Calendario hay
una especie de lista donde se expresan, como hemos dicho, las
festividades en que debía haber seis, cuatro, y dos cantores.
También está el oficio de la fiesta de San Rufo y el de la
octava. Al final hay dos o tres hojas de letra más moderna, que
contienen varias explicaciones y notas sobre la liturgia de esta
iglesia.

121. LECCIONARIO CON LAS HOMILÍAS. Un volumen en
4.° mayor, en pergamino, de 419 páginas. Es del siglo XIV. También
fue escrito este Códice para esta catedral, o sea para el coro;
sirviéndose de él en las lecciones los canónigos y
beneficiados a quienes correspondía por turno. Está
incompleto, pues al principio y al fin le faltan muchas
hojas. Por lo demás se halla en buen uso y se conoce que el trabajo
de este libro se hizo con mucha perfección. Todas las iniciales de
las lecciones están adornadas con dibujos de colores.

122.
HONORIO AUGUSTODUNENSE. ELUCIDARIO. Un volumen en 4.° prolongado, en
pergamino, de 164 páginas. Es del siglo XII. Al principio de la
primera página hay una nota de letra más moderna que dice,
Quoestiúnculae Theologicae. Después sigue este epígrafe:
Capitula Lucidarii. Las cuestiones se dilucidan en forma de
diálogo, figurando un discípulo que pregunta, y un maestro que
contesta dando la explicación.
Al principio de cada uno de los
libros en que se divide esta obra, hay un largo índice de todos los
puntos que se han de explicar. Después en las últimas hojas, que
son de otra época, hay los siguientes breves tratados. De la
Iglesia. De los sagrados órdenes. Del Sumo Pontífice. De la
dedicación de la iglesia. Del agua bendita. De las palmas y ramos,
etc. El final del libro está muy deteriorado y faltan además
algunas hojas.

123. EL EVANGELIO DE SAN JUAN. Un volumen en
4.° prolongado, en pergamino, de 204 páginas. Es del siglo XII.
Tiene los comentarios de Rábano Mauro, como los otros Códices de la
Sagrada Escritura de que hemos hecho mención; pero este es de época
más antigua, y de ahí que sea completamente distinto, así en el
tamaño como en lo demás del escrito, viñetas, etc.
En este
Códice se nota la particularidad de que el texto apenas ocupa una
quinta parte de cada página, a fin de dejar extenso margen para los
comentarios. También hay bastante distancia de línea a línea para
poner notas, viéndose allí muchas. Al principio de la primera plana
se ve con letra más moderna la nota que hemos copiado de otros
Códices: «Es de Santa María de Tortosa; si alguno lo quitare, sea
anatema» . Y al final después del evangelio de San Juan, hay una
página comentando las palabras de la profecía de Balaam,
Orietur stella ex Iacob.

124. COMENTARIOS SOBRE EL
MAESTRO DE LAS SENTENCIAS. Un volumen en 4.° mayor, en pergamino, de
242 páginas. Es del siglo XIII. No consta el hombre del autor. No
hay separación ni epígrafes que indiquen los libros del Maestro de
las Sentencias que se exponen en este Códice. Es de notar que los
comentarios principian por el libro segundo, como lo indican las
palabras de la primera página, que traducidas dicen: «Sobre el
principio del segundo libro del Maestro de las Sentencias propongo
una cuestión.»
En el folio 29 comienza el comentario al libro
primero, según lo expresa una nota de letra muy pequeña y de época
distinta que dice, Circa primum Sententiarum.
En los
folios 87 y 88 hay un índice de las cuestiones.

125. HUGO DE-NOVOCASTRO. Un volumen en folio en pergamino, de 292 páginas. Es
del siglo XIV. Principia este libro del siguiente modo: Incipit
secundus lecturae, Fratris Hugonis de Novocastro, Ordinis Fratrum
minorum, suppletus ab eodem.
Tal es el título que tiene. Su
contenido es una exposición o comentario del Maestro de las
Sentencias. El autor, que era un teólogo inglés,
(Nota: Novocastro : Newcastle : Castellnou etc...) vivió a
principios del siglo XIV. Dividió el libro en distinciones,
subdivididas en cuestiones, que se indican con números romanos en la
parte superior de cada página. Pero al llegar a la distinción XXI
se omitió el señalarlas. También se omitió desde esta distinción
hasta el fin del Códice, poner las iniciales del principio de cada
cuestión, que sin duda debían adornarse con dibujos como las demás,
y no se hizo; notándose que falta una letra y hay un claro en el
texto.
Al final está un índice muy completo de las cuestiones
que se tratan en este libro. Después del índice hay una nota, que
traducida del latín dice así refiriéndose al libro: «El que me
escribía, el nombre de Nicolás tenía.»

126.
FORMULARIOS PARA TODA CLASE DE INSTRUMENTOS. Un volumen en folio en
pergamino, de 114 páginas. Es del siglo, XV. Este Códice ofrece
especial curiosidad por la multitud de formularios que contiene,
redactados con mucha extensión y según derecho. No está completo.
Al principio le faltan algunas hojas, pues comienza el primer folio
por el instrumento de número XIV.
Aunque no hay foliación,
todos los instrumentos están numerados por su orden en el margen.
Además, al principio de cada instrumento hay un breve título o
epígrafe con letras encarnadas. Todos los instrumentos o formularios
de este Códice ascienden a 337, y aún faltan algunas hojas al fin.
De un mismo asunto hay varios formularios según las diversas
combinaciones y casos que pueden ofrecerse.

127. COMENTARIOS
A LOS LIBROS DE LAS DECRETALES. Un tomo en folio, en cartulina, de
238 páginas. Es del siglo XV. Este Códice se puede dividir en dos
partes; hasta la mitad del libro donde hay algunas hojas en blanco, y
desde allí hasta el fin. La primera parte comienza por los
comentarios del segundo libro de las Decretales, que tratan de los
juicios o procedimientos; no hay allí división ni señal alguna de
títulos ni capítulos. En la segunda parte están los comentarios a
los libros tercero y cuarto; y aunque tampoco hay separación de
títulos ni capítulos, cada caso que se resuelve está señalado con
letras más grandes.
También se observa lo que ya hemos dicho de
otros Códices; que la inicial quedó sin adornar, viéndose un claro
o blanco en el texto.

128. LOS CUATRO EVANGELIOS. Un tomo en
4.° en pergamino, de 394 páginas. Es del siglo XII. Al principio de
cada evangelio hay un índice y un prólogo. En el evangelio de San
Lucas el prólogo está sin concluir, pues sólo tiene algunas líneas
escritas, y siguen dos páginas en blanco donde parece que debía
concluirse.
Las primeras palabras de los evangelios son de letras
de muy buen gusto, y según el estilo de aquel siglo; siendo lástima
que las principales que sin duda hubieran sido muy notables, quedasen
por hacer, viéndose los claros donde debían estar. También son de
colores las iniciales de todos los capítulos y párrafos. Este
Códice a pesar de su mucha antigüedad se halla perfectamente
conservado.
Según se ve en el ultimo folio, después de los
cuatro Evangelios debían seguir en este Códice los Evangelios y
Capítulos para todo el año; pero probablemente se continuaron en
otro Códice.

129. SUMA O COMPENDIO DEL CÓDIGO DE
JUSTINIANO. Un volumen en 4.° mayor, en pergamino, de 234 páginas.
Al principio tiene un índice de los nueve libros en que se halla
dividida esta obra; pero le falta algún folio, pues comienza por el
índice del libro cuarto. Antes del primer capítulo, que se titula
de Sacrosanctis Ecclesiis, hay un breve prólogo que comienza
así, traducido del latín: «En nombre de Dios Padre, y del Hijo, y
del Espíritu Santo, principia la suma de todos los libros de leyes
promulgada por los jurisconsultos.» Siguen luego por su orden los
libros, que están indicados en la parte superior de cada folio. Los
capítulos se indican en el margen con números romanos; y los
epígrafes de cada asunto o cuestión están como es costumbre en
estos Códices, con letras encarnadas a continuación del texto. Las
iniciales de los capítulos son todas de colores, y las del primer
nombre de cada libro están adornadas con dibujos.
Este Códice
además del mérito de su antigüedad, tiene la especialidad de ser
muy raro en las bibliotecas de Europa. Lo prueba, que al poco tiempo
de haber publicado los señores Denifle y Chatelain el Inventario
de los Códices de esta catedral
, en la Revista que ya hemos
dicho impresa en París, titulada Revue des Bibliothéques, un
publicista de aquella ciudad nos escribió pidiendo copia de algunos
capítulos de este Códice, para completar y ampliar según dijo, una
obra de derecho regional que había publicado en Francia hacía pocos
años.




100-110




100.
HORACIO. Un volumen en 8.° en pergamino, de 262 páginas. Es del
siglo XI. Al principio y al fin le faltan algunas hojas.
Tratando de este Códice los Sres. Denifle y Chatelain, dicen que es
sin duda el más antiguo de España que contiene las obras de
Horacio, pues algunos manuscritos de la misma obra que
se conservan en la Biblioteca del Escorial son del siglo
XIII
y posteriores.
Llaman la atención en este antiguo
Códice la multitud de glosas o notas puestas en el margen y entre
las líneas, tan diminutas, que admira cómo pudieron escribirse.

Al principio de cada uno de los libros en que se divide esta obra
de Horacio
, hay una viñeta de muy buen gusto, estilo de aquel
siglo. Pero se distinguen principalmente las que se ven al principio
del libro dirigido a Mecenas, y al comenzar el «Arte
poètica.»

101. LA CARTA DE SANTIAGO, Y CONCORDANCIAS DE LAS
CARTAS DE SAN PABLO. Un volúmen en 4.° en pergamino, de 370
páginas. Es del siglo XII. Este Códice se divide en tres
partes, que se escribieron en diversas épocas. La forma del escrito
de la carta de Santiago es completamente distinta de los
otros. Luego sigue una especie de repertorio, que comprende dos o
tres folios, donde se indican algunos asuntos de los que San Pablo
trata en sus cartas. Por último, y esto ocupa la mayor parte
del libro, están las Concordancias de las cartas de San Pablo,
con una introducción general de Rábano Mauro.
En este
tratado no hay división alguna. Únicamente se distingue la
separación de cada asunto o carta por medio de una inicial muy
grande de color encarnado, con algún sencillo dibujo. Al principio
de este Códice hay una nota, que también se lee en algún otro.
Dice así: «Este libro es de Santa María Dertusense. Si
alguno lo quitare, sea anatema.»

102. FORMA DE VISITAR A UN
HERMANO ENFERMO. Un volumen en 4.°, en pergamino, de 260 páginas.
Es del siglo XIV. Como en aquel tiempo los canónigos de esta
catedral vivían en comunidad, además de los ritos generales había
algunas prácticas especiales de esta iglesia.
En este Códice se
expresa en muy grandes letras todo lo que debía practicarse cuando
se tenía que administrar la Santa Unción a un Capitular,
así como la recomendación del alma y demás hasta
darle sepultura. También está el oficio de difuntos.

Es muy curioso por lo que se refiere a la parte antigua
histórica, lo que dice este Códice desde el folio 122 hasta su
conclusión. Se explica allí lo referente a la procesión que
se hacía por la catedral y el claustro en la mañana
del día de difuntos; y con este motivo se dan noticias de
mucho interés histórico. Se dice, que la procesión primeramente
irá al lugar donde estaban los sepulcros de los Obispos;
después pasará al de los sepulcros de los canónigos;
luego seguirá por la parte donde se hallaba el granero, y
entrará por el claustro a la casa donde residían en
comunidad los canónigos; volviendo después al claustro,
y dirigiéndose a la parte de detrás del altar de Santa
María
, (el ábside) cantando una absolta en cada
uno de dichos puntos.
También se cita una puerta llamada
septentrional, y otra occidental.
Al principio de
este Códice hay algunas hojas truncadas que se refieren a la
administración del sacramento del bautismo.

103. SAN
GREGORIO PAPA. Un volumen en 8.° en pergamino, de 218 páginas. Es
del siglo XII. Contiene la exposición del libro de las Parábolas,
del Eclesiástes, Sabiduría, Josuè, Jueces, Reyes, Números, Éxodo,
Gènesis, y algún otro. Al fin hay un breve comentario sobre un
libro que se titula de «Jesús de Sirach». Tal debe ser el
nombre del autor, porque después dice: Explicit liber Iesu
fili Sirach.
Son de notar en este Códice algunas
hojas del principio y del fin, de letra cursiva muy antigua, y de una
pequeñez y claridad admirables. Los epígrafes de cada exposición
están señalados con letras encarnadas. En los últimos libros hay
un índice al principio. En uno de los últimos folios se ve un
espacio de unas dos líneas, con signos muy extraños que parecen de
música.

/ Nota:
https://archive.org/details/VetusLatina112SirachEcclesiasticus/page/n8/mode/2up
aparece Sirach (Ecclesiasticus) /

104. SERMONES
PANEGÍRICOS. Un volumen en 8.° en pergamino, de 688 páginas. Es
del siglo XIV. Contiene panegíricos de los Santos más
principales, y de algunas festividades y Misterios. Al principio hay
dos índices. Uno alfabético, y otro en el que están según el
orden del calendario, los nombres de los Santos y Misterios cuyos
panegíricos se hallan en este libro, expresando los folios que
comprenden. En algunos hay dos o más sermones.
Los asuntos
conforme a la costumbre de estos Códices, se indican en el texto con
letras encarnadas. En la primera página hay una nota de letra más
moderna, que dice «Sermones» y después «Número 15». Lo
que prueba que en algún tiempo ya se formó inventario de estos
libros.

105. HUGO DE SAN VÍCTOR. Un volumen en 4.° en
pergamino, de 149 páginas. Es de principios del siglo XIII. Contiene
las cinco septenas, quinque septenas, del expresado
autor, que comprenden hasta la página 9, al fin de la cual hay una
nota que traducida dice: «Concluye Hugo sobre las cinco
septenas.» Después hay unos soliloquios del mismo autor; la
exposición de algunos salmos de David; y un tratado
sobre algunas cuestiones del antiguo testamento. No hay
foliación ni índice.
Aunque el autor solamente se titula Hugo,
y hay varios escritores de este nombre, estos tratados pertenecen a
Hugo de San Víctor, Religioso de la Abadía de San Víctor
de París
; por ello sin duda se le aplicó este nombre. Falleció
dicho escritor a mediados del siglo XII.

106. SAN GREGORIO MAGNO. Un volumen en 4.° en pergamino, de 270 páginas. Es de
principios del siglo XIII. Contiene las Homilías de
dicho Santo Padre. La primera es sobre el Evangelio que se canta el
Domingo de Ramos antes de la bendición de las palmas y ramos; y la
última se titula in natale virginis.
Después de estas
Homilías siguen varios sermones de Santos en idioma Provenzal,
que por los siglos XIII y XIV fue la lengua literaria en el Reino de Aragón, o sea el peculiar lenguaje de nuestro pais.

Dichos sermones, que comprenden 30 folios, hacen muy notable este
Códice por el idioma Provenzal con que están escritos; de
tal modo que en poco tiempo se han recibido cartas de algunos
centros literarios del extrangero, pidiendo copias
y noticias de este curioso escrito Provenzal, único
que existe en los Códices de esta iglesia.

107. BOECIO Y
ARISTÓTELES. Un volumen en 4.° en pergamino, de 594 páginas. Es de
últimos del siglo XIII o de principios del XIV. Contiene los Tópicos
de Boecio. Con este nombre se designaba en la filosofía
antigua cierto método o forma de argumentar.
Antes de esto hay un tratado con figuras de geometría; al
principio le faltan algunas hojas.
Después siguen los Tópicos
de Aristóteles, donde se ve gran multitud de notas en el
margen y en medio de las líneas. Merece notarse una curiosa tabla,
en la que se explica todo lo referente a la conversión de las
proposiciones, por un método sumamente ingenioso.
También hay varias figuras o líneas para aclarar y hacer comprender
lo que se explica en estos tratados.
Al principio de algunos de
los libros en que se divide la materia de este Códice hay un blanco.
Es porque se dejó la letra inicial para adornarla, según la
costumbre de aquel tiempo, y no llegó a verificarse. Esto manifiesta
que un amanuense era el que escribía el Códice,
y otro ú otros los que se empleaban en los dibujos de las
letras.

108. JUAN BIRIDAN Y ALBERTO DE SAJONIA. Un volumen de
400 páginas, escrito en cartulina. Es del siglo XIV. Contiene las
cuestiones sobre el arte antiguo, de Juan Buridan, que
fue profesor de la Universidad de París, y adversario
muy hábil y constante del realismo. El tratado de éste
comprende hasta el folio 44.
Después están las cuestiones
logicales
de Alberto de Sajonia, que comprenden hasta el
fin. No hay división de títulos en este Códice, ni epígrafes que
indiquen los asuntos. Todas las cuestiones se distinguen con simples
apartados, faltando en algunos la letra inicial que se dejó para
dibujar, y no llegó a hacerse esto.

109. SERMONES. Un tomo
en 4.° en pergamino, de 450 páginas. Es del siglo XIII. No consta
quién es el autor. En la distribución de los sermones hay poco
orden, pues están intercalados los sermones de los Misterios
con los de la Santísima Virgen y con los panegíricos
de Santos; y como no hay índice, para registrarlos se
debe recurrir al epígrafe de cada sermón, que está
(esta en el original) señalado con letras encarnadas.
En algunos
asuntos hay más de un sermón. El final no está completo. Al
principio de este Códice se ve un número de letra más moderna; lo
cual prueba lo que hemos dicho tratando de algún otro Códice,
respecto a que en los tiempos pasados se formó inventario de
estos libros.

110. SUMA O COMPENDIO DE LA PENITENCIA. Un
volumen en 4.° en pergamino, de 273 páginas. Es del siglo XIV. Este
Còdice comprende varios tratados de distintos autores,
relativos todos a la penitencia. Primero hay algunas
instrucciones sobre la administración del sacramento de la
penitencia
. A esto sigue un epígrafe que traducido dice:
«Principia el libro de las meditaciones de San Bernardo de
Claraval
.» Luego hay otro tratado que se titula así:
«Principian las meditaciones de San Agustín, Obispo de Hipona
Sigue otro que dice: «Principia el libro de los Soliloquios de
San Isidoro
.» Después otro que comienza de este modo:
«Principian los tres libros de Próspero sobre la vida
contemplativa y activa.
Sin duda por la relación que tienen con
las materias de este Códice, se añadieron los siguientes opúsculos.
Uno cuyo epígrafe dice: «Principia la útil ocupación de
Anselmo, que se titula, Misericordia de la Pasión del
Señor
.» Después hay una oración de San Bernardo. Y por
último un oficio o rezo de la Pasión del Señor,
que es distinto del que se usa actualmente.
Al principio de la
primera plana hay una nota escrita con la misma letra que el Códice,
la cual traducida dice así: «Este libro es de Santa Maria de
Tortosa
. Si alguno lo quitare, sea anatema.» La forma de dicha
nota manifiesta que este Códice fue escrito para esta iglesia.
Al final está en letras encarnadas hechas con cierto capricho y buen
gusto, lo que solía ponerse en algunos Códices: «Este libro se ha
escrito; el que lo escribió sea bendito.»








46-50




46. ROFREDO
BENEVENTANO. Tratado sobre el modo de hacer los memoriales o
súplicas, según el derecho canónico y las fórmulas de la Curia
Romana. Un volumen en folio en pergamino, de 125 páginas. Es del
siglo XIII. Este Códice contiene formularios razonados en latín, de
todas las súplicas que se habían de dirigir a las autoridades
eclesiásticas sobre cualesquiera asuntos, pero principalmente sobre
los de matrimonios y sus impedimentos.
Al principio tiene una
hermosa viñeta, donde se ve una figura muy bien dibujada con un
vestido especial; tal vez el que usaban en aquel tiempo los empleados
de la Curia Romana. En la página 39 hay otro dibujo muy
curioso.
Después de este Tratado sigue otro que se titula: «De
los diezmos» De décimis. Comienza en la página 55. No
consta el autor; pero es probable que sea el mismo del primer
Tratado, porque el escrito es todo seguido y sólo se divide por una
viñeta. En la página 69 hay un grupo de varias figuras, que según
parece representan al Obispo en el acto de recibir los
derechos de procuración o de visita, que antes
le pagaban los párrocos.

47. SANTO TOMÁS DE AQUINO.
Comentario a la Metafísica de Aristóteles. Un volumen en
folio mayor, en pergamino, de 166 páginas. Es de principios del
siglo XIV. Todos los folios están numerados; pero esto se hizo en
época posterior, pues por lo general en los Códices antiguos no se
numeraban los folios. En este Códice, como en algún otro que hemos
reseñado, también se ven en el margen los puntos agujereados que
sirvieron de guía para escribir las líneas.
Las letras del
principio de todos los capítulos están adornadas con dibujos de
colores. En el margen hay algunas notas de diferente letra. Al final
se leen estas que traducimos del latín: «Concluye el escrito sobre
la Metafísica de Santo Tomás. Terminado el libro, dése
alabanza y gloria a Cristo» Después en letra más moderna hay otra
nota que dice:
«Este escrito sobre la Metafísica es de Fray
(sigue raspado un nombre) de la orden de Frayles Predicadores del
Convento de Zaragoza
, que lo compró (siguen algunas palabras
confusas) el año 1531.

48. LIBRO DE LA PASIÓN DEL SEÑOR.
Un volumen en folio, escrito parte en pergamino y parte en cartulina,
de 337 páginas. Es del siglo XV. El título que tiene al principio
de la primera página traducido del latín dice así: «Comienza el
libro de la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, compilado por un
Fraile cartujo.» Además de la Pasión hay varios tratados
relativos al Divino Salvador, como la Resurrección,
sus apariciones a los discípulos, etc.
La materia está
distribuida en capítulos, y las iniciales se hallan adornadas con
dibujos negros; solamente hay dos de colores en la página
245. Después de cada capítulo hay una oración o súplica muy
adecuada al asunto de que allí se trata.
La primera página de
este libro está orlada con dibujos y dorados,
viéndose algunas aves muy bien dibujadas; todo produce un bellísimo
efecto. En la página 25 hay otra orla negra, que se comenzó
a dibujar con colores, pero no llegó a concluirse. Es
probable que los dibujos negros que hay en este libro, que son
muchos, debían completarse después con colores.
Al fin están
aquellos hermosos versos de San Bernardo:
Iesu dulcis
memoria; etc.

Es de notar en este Códice que las hojas de
cartulina se hallan intercaladas con las de pergamino, de modo que
cada tres folios de cartulina hay dos de pergamino; ignorándose el
motivo de esta distribución tan original, que también se observa en
algunos otros Códices.

49. JUAN ESCOTO. Un tomo en folio en
pergamino, de 184 páginas. Es de últimos del siglo XIII, o de
principios del XIV. Contiene los comentarios del libro tercero del
Maestro de las Sentencias. Al principio hay una hoja de diferente
letra, que según parece no pertenece a este Códice, pues
por
los títulos o epígrafes se deduce que trata de derecho canónico.
Al comenzar la segunda página hay dos versos latinos relativos a
Juan Escoto; y en el margen y de otra letra, se ve esta nota
también en latín: «Juan Escoto sobre el tercero de las
Sentencias.»

Aunque este Códice no está foliado, la
materia se halla bien indicada por medio de números romanos de
colores, que expresan las treinta y nueve distinciones en que está
dividido el libro. Al final hay un índice muy completo; y después
una nota que traducida del latín dice: «Concluye la
Tabla sobre
el tercer libro del Maestro de las Sentencias, compuesto por Fray
Juan Escoto
, de la orden de Frayles menores

50.
TRES TRATADOS DISTINTOS. Un volumen en 4.° mayor, escrito parte en
cartulina y parte en pergamino. Tiene 146 páginas. Es del siglo XV.
Al principio le faltan algunas hojas.
En el primer Tratado que
comprende hasta la página 16, se dan todas las noticias mitológicas
relativas a los siguientes dioses del paganismo:
Júpiter, Marte, Apolo, Venus, Mercurio, Diana, Minerva, Juno,
Cibeles, Vulcano, Neptuno, Pan, Plutón y Baco.
El segundo
Tratado que llega hasta la página 115, contiene los 14 libros de la
Metamorfosis de Ovidio. Al fin de los mismos hay una nota que
dice: Explicunt Moralitates libri Ovidii Methamorfóseos. Deo
gratias. Sigue después un índice alfabético muy extenso que
comprende siete folios. Y al final se hallan estas notas, que
traducidas dicen: «Concluye la Tabla, super Moralitate, del libro de
Ovidio, Metamórfosis, compuesta por Fray Tomás de Anglia, de la
orden de Predicadores, Deo gratias. Fue escrita en Lérida, y
concluida el día 4 de Agosto del año del Señor 1430. El que la
escribió se llama Gundisalvo, su apellido es Riquexor.»

En el tercer Tratado que comprende los ocho folios últimos, hay
seis comedias de Terencio, a las que precede un prólogo. Y
después de todo una nota que dice: «Concluye el breve y muy útil
opúsculo sobre el libro de Terencio. Lérida 16
de Septiembre del año 1430.»







51-55

72-82

72. TRATADO
DE LAS ELECCIONES CANÓNICAS. 



Un volumen en 4.° prolongado, en
pergamino, de 93 páginas. Es del siglo XIV. Toda la materia
referente a los tres modos de hacer las elecciones según el derecho
canónico, hállase expuesta en este libro con mucha claridad. Aunque
no hay capítulos que dividan los asuntos, todas las cuestiones están
señaladas con epígrafes de letra encarnada.
Este Códice está
escrito con gran perfección y se halla bien conservado. Como los de
su clase, abunda en letras con dibujos de colores. Al lado del texto
hay comentarios del mismo autor. En el principio del libro se lee un
epígrafe, que traducido del latín dice: «Comienza aquí el libro
compuesto por el Maestro Guillermo de Mondagoto, Arcediano
Nemausense
, sobre el modo de hacer las elecciones y ordenar los
procesos relativos a las mismas».





73. FLOS
SANCTORUM O VIDAS DE SANTOS.
Un volumen en 4.° mayor, en
pergamino, de 673 páginas Es del siglo XIV. Al principio le faltan
algunas hojas; el final está completo. Tiene de especial este libro,
que antes de la vida de cada Santo se explica la etimología
del nombre
y su significado, con datos sumamente curiosos
que suponen en el autor mucha erudición. No consta quien sea éste.
Es muy probable que fue algún religioso agustino, porque la
única viñeta que hay está en la vida de San Agustín,
obispo y doctor, viéndose allí una imagen del Santo.
Además
de las vidas de los santos, hay pláticas sobre varios
asuntos, como la Cuaresma, Dominicas que la preceden.
Resurrección, y otros misterios y fiestas de la
Santísima Virgen.

74. PRISCIANO EL MAYOR. TRATADO DE
GRAMÁTICA.
Un volumen en 4.° mayor prolongado, en pergamino, de
258 páginas. Es del siglo XI. Dicho autor fue un célebre
gramático latino que nació en Cesarea a fines del
siglo IV. El año 525 abrió una escuela que tuvo gran
fama por el número de gramáticos distinguidos que de allí
salieron. Compuso varias obras; pero la más notable es esta.
/
Nota: Si nació a finales del siglo
IV, pongamos 399, y en el año 525 abrió él mismo una escuela,
vivió más de 125 años. Priscianus Caesariensis (fl. 500), más
conocido como Prisciano, fue un importante gramático del latín,
nacido en Caesarea, Mauritania, (en la actualidad la ciudad de
Cherch
ell en Argelia). Según Casiodoro enseñó latín en
Constantinopla. https://es.wikipedia.org/wiki/Prisciano
Su obra más
importante es una gramática del latín que recibe el nombre
de Institutiones Grammaticae. /
Se divide en 18 libros, y
no en 14 como dice algún escritor. Al principio, después de un
prólogo, pone el autor un índice o resumen de los 18 libros. Antes
hay dos hojas que no pertenecen a este Códice; en la primera se ve
parte de un índice sumamente curioso por la forma con que está, el
cual debía pertenecer a alguna obra de derecho del siglo XI, o
quizás de antes.
Este Códice es el que se conserva en mejor
estado entre todos los de aquel siglo, a pesar del servicio que se
conoce prestó en su tiempo. La letra es muy legible. Hay muchas
notas en el margen, todas con caracteres pequeñísimos hechos con
gran perfección. Pero lo que llama la atención principalmente es el
extraordinario número de notas puestas entre las líneas del texto,
tan diminutas, que admira cómo pudieron escribirse allí.
Los
títulos en que se dividen los libros, o sea los epígrafes de cada
asunto, están señalados con letras encarnadas. Las iniciales de los
apartados son de colores; pero sin dibujos, según el estilo de aquel
tiempo. También hay una viñeta al principio, de muy buen gusto, y
algunas otras en lo demás del libro.
Al fin de todo se ve
una nota, en caracteres encarnados muy grandes, que traducida dice:
«Concluye el libro de Prisciliano, Gramático, Doctor de la ciudad
de Roma.»

75. TOMÁS DE HIBERNIA. MANOJO DE FLORES. Un
volumen en 4.° mayor prolongado, en pergamino, de 254 páginas. Es
del siglo XIV. Contiene un repertorio por orden alfabético de varios
nombres o asuntos pertenecientes a la Teología dogmática y moral,
Sagrada Escritura, Filosofía, etc. De ahí el título de Manojo de
flores, que se le aplica con muchas propiedad.
Está en
forma de diccionario. Pero además el autor tuvo el buen gusto de
señalar en el margen, por medio de alfabetos de letras minúsculas,
los párrafos en que se divide el asunto que allí se trata.
Cada
nombre del diccionario tiene la inicial adornada con dibujos de
colores. También son de colores las iniciales de todos los párrafos.
Al principio le faltan algunas hojas; el final está completo. Hay un
índice que contiene todos los nombres de los asuntos que se explican
en este diccionario. Después siguen cuatro folios que son como una
ampliación.
Antes del índice hay una nota que traducida dice
así: «Esta obra fue compilada por el Maestro Tomás de Hibernia, en
algún tiempo Sócio de Sorbona».

76.
SANTO TOMÁS DE AQUINO. SOBRE EL LIBRO II DEL MAESTRO DE LAS
SENTENCIAS. Un volumen en 4.° mayor prolongado, en pergamino, de 146
páginas. Es de últimos del siglo XIII o de principios del XIV. En
la parte superior de cada página están señaladas por su orden las
44 distinciones en que se divide esta obra. Al final hay un índice
hecho posteriormente, que sólo llega hasta la Distinción 35.
Antes
del índice se leen unas notas de diversa letra, que traducidas
dicen: «Concluye el escrito de Fray Tomás, sobre el segundo
de las Sentencias.» Prueba esto que cuando se escribió el Códice
aún no había sido canonizado Santo Tomás. Después
hay otra nota que dice. «Este libro es de (sigue un nombre que está
raspado). Cualquiera que lo vendiere sea anathema. Luego hay
otra que dice así: «Este libro es de Fray (sigue un nombre raspado)
de la orden de Frailes predicadores del convento de (hay otro nombre
raspado) de la provincia de Aragón».
Al fin de todo en
la última página todavía hay otras notas que dicen: «Yo Antonio
Aymerich
, Bachiller en artes, el viernes día 29 de Abril
compré este libro al Reverendo confesor del
Rey de Navarra, en la ciudad de Valencia, el año 1435
del Nacimiento del Señor.» Y más abajo se lee: «Este libro es de
Pascual March, quien lo compró por 44 sueldos

77.
LETANÍAS Y ORACIONES. Un volumen en 4, en pergamino, de 44 páginas.
Es del siglo XIV. Se comprende que este Códice se usaba en todas las
rogativas que se hacían en esta catedral. Después de las Letanías
de los Santos, siguen las preces y oraciones pertenecientes a cada
rogativa. Entre otras de las que ofrecen interés histórico, está
la tradicional plegaria que se canta en esta catedral
en las rogativas pro pluvia, que dice así: «Dómine
rex, Deus Abraham, dona nobis pluviam super faciem terrae, ut discat
pópulus tuus quia tu es Dóminus Deus noster.»

También hay
una oración propia de la Santa Cinta, diferente de la que se
halla en el Breviario de esta catedral. En dicha oración se
expresa la aparición de la Santísima Virgen en esta
iglesia y la entrega de su Sagrado Cíngulo. Como es un
documento de grande valor histórico, pues confirma aquella veneranda
tradición, creemos conveniente insertarlo tal como está: Dice así:

«Omnipotens sempiterne Deus, qui gloriosae Virginis Matris
Mariae corpus et animam, ut dignum Filii tui habitaculum effici
maereretur, Spiritu Sancto cooperante praeparasti; da, ut cujus
Visitatione et Cinguli traditione hanc Ecclesiam
decorasti, ejus pia intercessione ab instantibus malis et á
morte perpètua liberemur. Per Dominum...»

/ Nota: á
y perpètua aparecen con tilde en el pdf que tengo, otros textos en
latín también están con tilde en este libro.
La ae del latín,
æ, la escribo en este libro ae -

https://www.delcastellano.com/errores-pronunciacion-latin/


ae (y oe)


Por increíble que pueda parecer, el
diptongo ae se pronuncia [ae̯]. Por tanto, hay que evitar la
pronunciación arromanzada como una simple *[e]: quae se lee [kʷae̯]


, no *[ˈkwe]. Tortosa : Tortose,
Lleida : Lleide, Maella : Maelle, Favara : Favare, etc.
La
bibliografía anglosajona tiende a considerar que ae se pronunciaba
[ai], aunque esta pronunciación es de época arcaica (siglo iii a.
C. y anteriores). Lo mismo se aplica al diptongo oe, menos frecuente,
que se pronuncia [oe̯]: amoenus se pronuncia [aˈmoe̯.nus]


, no *[aˈmenus] /

78. PEDRO DE
TARANTASIA. COMENTARIOS SOBRE EL LIBRO II DEL MAESTRO DE LAS
SENTENCIAS. Un volumen en 4.° mayor, en pergamino, de 242 páginas.
Es del siglo XIII.
El autor es conocido con este nombre por ser
natural de Tarantasia, provincia y condado de los antiguos
estados sardos. Las 44 Distinciones del libro II del Maestro
de las Sentencias están completas en este Códice, y se señalan con
números en la parte superior de cada página, y además en el
margen. Hay algunas notas de época posterior. Las iniciales de los
párrafos están adornadas con dibujos de colores.
Al principio
hay un índice. También se ve allí una hoja de distinta época y
diferente letra, que no pertenece a este libro.

79. ALANO DE
INSULIS. SOBRE LAS DIVERSAS SIGNIFICACIONES O USOS QUE TIENEN ALGUNOS
NOMBRES EN LA SAGRADA ESCRITURA. Un volumen en 4° en pergamino, de
321 páginas. Es de principios del siglo XIII. Este curioso libro
tiene alguna semejanza con las Concordancias de la Sagrada Escritura,
aunque es más reducido y su objeto también es distinto.
Le
precede un prólogo dirigido a Ermengaldo, Abad de San Gil.
Después siguen los nombres por orden alfabético. Antes de cada
letra hay un índice; luego siguen los nombres cuyo uso se trata de
explicar, estando señalados con letras encarnadas en el texto los
libros de la Sagrada Escritura a que se refiere el uso de cada
nombre.
A pesar de su mucha antigüedad está muy bien conservado
este Códice. Todas las iniciales de cada párrafo son de colores, y
algunas están adornadas con hermosas viñetas. Al final hay la
acostumbrada nota que dice. «Este libro ha sido escrito; el que lo
escribió sea bendito».

80. FRAGMENTOS DE LOS CLÁSICOS Y
OTROS AUTORES ANTIGUOS. Un Volumen en 4.° de 328 páginas. Está
escrito parte en cartulina, que pertenece al siglo XIII, y parte en
pergamino, que es del siglo XII.
Contiene escritos de Horacio,
Juvenal, Marcial, Salustio, Cicerón y Séneca. También los hay de
Macrobio, (las Saturnales) y de Macer (del poder de las hierbas.)

Además un tratado de Geometría con figuras geométricas, y otro
del eclipse del sol.

81. CAPITULARIO PARA TODO EL AÑO. Un
volumen en 4.° en pergamino, de 380 páginas. Es del siglo XIV. Al
principio hay un Calendario muy deteriorado por el uso, en el cual
falta una hoja que debía contener los meses de Noviembre y
Diciembre.
Tiene de particular este Códice, que se halla en él
la oración propia de la Santa Cinto,
(Cinta, Cingulis, Cíngulo) de que ya hemos tratado en el
Códice de n.° 14; pero en el que nos ocupa dicha oración está en
el mismo Capitulario, y no en hoja añadida como en el otro Códice.
También hay algunas otras oraciones de interés histórico. Todas
las iniciales de los capítulos y de las oraciones se hallan
adornadas profusamente con dibujos de colores.

82. MISAL. Un
volumen en 4° en pergamino, de 460 páginas. Es del siglo XIII. Está
escrito con muy buen gusto y con profusión de letras de adorno.
Tiene además algunas viñetas muy distinguidas y de un estilo
especial. Hay un Calendario muy completo; y lo mismo que en otro
Códice reseñado, el día 4 de Febrero hay una nota que traducida
dice: «Aquí comienzan a cantar las aves». Y el día 24 de Abril
otra que dice: «Salida de Noé del arca.»
En este Calendario ya
está la fiesta de la Concepción de la Virgen, el día 8 de
Diciembre; la oración está añadida en el margen en su lugar
respectivo, y es diferente de la que se usaba antes de la actual.
También se halla el día 18 de Diciembre la fiesta de la
Expectación del parto de Nuestra Señora
, que se puso después
porque la letra no es la misma que lo demás del Calendario.




83-93

94-99




94.
SERMONES PARA TODO EL AÑO. Un volumen en 4.° menor, en pergamino,
de 334 páginas, Es del siglo XII. No consta el nombre del autor.
Comienza por el primer sermón de Adviento, y siguen después los de
Navidad, San Esteban, etc. Al principio los asuntos o sermones están
señalados con letra encarnada en el mismo texto antes de cada
sermón; pero a la mitad del libro ya no están así, por lo cual es
muy difícil poderlos registrar.

95. BREVIARIO. Un volumen en
8.° en pergamino, de 422 páginas. Es del siglo XIV. Al principio y
al fin le faltan algunas hojas. En este Breviario es de notar, que
sólo contiene los oficios de las festividades o misterios, y los de
las dominicas y ferias. Aunque no consta que fuese para el rito de
esta catedral, se deduce que lo era, porque en los oficios de algunas
fiestas se expresa el número de cantores que debía haber según la
costumbre de esta iglesia.
El Salterio se halla al final, a
diferencia de los actuales Breviarios en que está al principio.
También llama la atención que entre las absoluciones y bendiciones
de cada nocturno estén intercalados los oficios de San Onofre
y San Cristóbal. Este dato y algunos otros del archivo
capitular, manifiestan que antiguamente había en esta ciudad mucha
devoción a los expresados Santos.
A pesar de ser este Breviario
de pequeña dimensión, todas las iniciales de las lecciones y
oraciones, que son muchas, están profusamente adornadas con dibujos
de colores.

96. FRANCISCO DE MAIRON. COMENTARIOS A LOS LIBROS
DEL MAESTRO DE LAS SENTENCIAS. Un volumen en 4.° mayor prolongado,
en pergamino, de 484 páginas. Es del siglo XIV. El autor era un
religioso francés de la orden de San Francisco, que
floreció en el siglo XIII. Fue discípulo del célebre Juan
Escoto
, y profesor de literatura en París. Escribió muchos
trabajos teológicos y filosóficos. En el Códice que
nos ocupa primeramente están los Comentarios a los libros del
Maestro de las Sentencias. Al fin del cuarto libro, que en este
Códice se halla en primer lugar, hay un índice. Después sigue el
libro tercero, y a continuación de este el segundo. No se sabe el
motivo de esta alteración en el orden de los libros.
Al fin del
segundo libro hay una nota que traducida dice así: «Concluye la
suma sobre el segundo de las Sentencias, según el Maestro
Francisco de Maioris
(Mairon) de la orden de Frailes
menores
. Fue escrito en Paris.» Y luego otra nota que dice: Hic
explicit totum; magister da mihi potum
.
A continuación
siguen unos tratados filosóficos. Después hay un comentario a la
Decretal que principia: «Cum Marthae. De celebratione Missarum. Y
por último un tratado de Juan Escoto «Sobre el primer principio.»
Así se titula. Al final le faltan algunas hojas.

97. ARTE Y
DOCTRINA PARA HACER SERMONES. Un volumen en 4.° menor, en pergamino.
Es del siglo XIV. Su autor es conocido con el nombre de Austancio.
Así se denomina en el epígrafe del libro, que traducido dice: «Arte
y doctrina para hacer sermones y conferencias, ordenado por el
Reverendo en Cristo Padre Fray Austancio, de la orden de
Predicadores, eximio y notable Doctor en sagrada Teología». Sigue
un pequeño diccionario sobre el sentido o aplicación que puede
darse a varios hombres. Este opúsculo sólo tiene 34 páginas.

Después hay otro opúsculo de Alano de Insulis,
que tiene 120 páginas. Es del siglo XIII. Comienza de este modo:
«Toda ciencia usa de sus reglas» Al fin se halla una hoja de
diferente época, y un canto con notas de música. Sigue un opúsculo
de la Trinidad; un tratado de la fé; y algunas oraciones de varios
Santos. Un poema de Marbodio titulado «La oración del
penitente que ha pecado muchas veces». Y algunos versos de
Hildeberto, Arzobispo de Tours, filósofo y poeta
latino, que nació a mediados del siglo XI. Al final también hay un
canto con notas de música. Estos últimos escritos, que comprenden
112 páginas, son del siglo XII.

98. BREVIARIO. Un volumen en
4.° menor, en pergamino, de 478 páginas. Es de últimos del siglo
XIV, o de principios del XV. Está incompleto, pues le faltan
bastantes hojas al comenzar y al fin. En la página 480 hay una nota,
que traducida dice: «Principia el Breviario según la ordenación y
costumbre de la iglesia y diócesis de Tortosa
Es digno
de notar, que además de la iglesia se hace mención de la diócesis;
pues por lo general en todos los Breviarios propios de esta catedral
tan sólo se dice, «de la iglesia de Tortosa», aunque con
esta denominación se entiende también la diócesis.

99.
SERMONES PARA TODO EL AÑO. Un volumen en 4° menor, en pergamino, de
518 páginas. Es del siglo XIII. Su autor fue Nicolás de Gorrau,
teólogo francés, que nació a principios del siglo
XIII. Después de haberse distinguido mucho en el púlpito, el rey
de Navarra
le nombró confesor suyo. Además de esta obra
escribió unos comentarios sobre la Biblia.
En el Códice que nos
ocupa, en algunos sermones del principio y en otros del fin del
libro, se indican los asuntos con letras encarnadas al comenzar el
sermón. Pero en la mayor parte de ellos no se hace indicación
alguna; y sólo se conoce la separación de cada asunto por las
letras iniciales
encarnadas que hay al principio.








61-71

61. LOS
LIBROS DE JEREMÍAS E ISAÍAS, con las glosas o comentarios de Rábano
Mauro. Un volumen en folio grande, en pergamino, de 394 páginas. Es
de principios del siglo XIII. Este Códice es igual al de los números
2, 12, 23 y 28, que también contienen libros de la Sagrada
Escritura. Se 



comprende que en todos se adoptó la misma forma.

La viñeta del principio del libro de Jeremías fue
cortada. Antes de los Trenos o Lamentaciones hay otra
de muy buen gusto, que representa a dicho Profeta enfrente de la
ciudad de Jerusalén, y en actitud dolorosa, anunciando los
males que sobre ella habían de venir como justo castigo de sus
crímenes. También se ve otra viñeta al principio del libro de
Isaías
, alusiva a algún pasaje de las profecías que en él se
contienen.
Antes del libro de Jeremías hay un prólogo. Así en
este libro como en el de Isaías, los capítulos están señalados al
margen con números romanos de colores. Los comentarios son muy
abundantes; la letra de estos y la del texto es de una perfección
admirable, estando también adornadas con dibujos las iniciales de
cada capítulo.

62. HOMILÍAS DE ALGUNOS SANTOS PADRES.- Un
volumen en folio mayor, en pergamino, de 306 páginas. Es del siglo
XII. A pesar de su mucha antigüedad, y del servicio que se conoce
prestó en su tiempo este Códice, se halla en muy buen estado de
conservación, y se distingue de un modo especial entre todos los
libros del siglo XII, por su tamaño, pues aquellos no pasan de la
mitad de las dimensiones que tiene este. Además fue escrito con
caracteres muy claros, dejando gran margen en todos los folios,
aunque al parecer no debía ponerse allí ninguna nota, pues no la
hay en todo el libro, cosa que no se observa en los otros Códices
antiguos.
También se distingue este Códice por la profusión de
adornos en las iniciales de los capítulos, que ostentan colores muy
vivos, con los dibujos propios de aquel siglo, en algunos de los
cuales se ven caprichosas figuras. Al principio y al fin le faltan
hojas, no pudiéndose determinar cuantas sean porque no tiene
foliación. En el margen de los folios se ven muy claramente los
puntos agujereados para marcar las líneas; lo que prueba cuan
antigua era esta práctica.

63. CÓDIGO DE JUSTINIANO. Un
volumen en folio mayor, en pergamino, de 232 páginas. Es del siglo
XIV. Contiene los nueve primeros libros de los doce que componen el
Código de Justiniano. Tal vez entonces no se considerarían
indispensables los otros tres libros; o quizás su contenido estaba
resumido en algún otro Códice de esta catedral.
El que nos
ocupa se halla completo al principio y al fln, si bien está muy
deteriorado por la acción del tiempo, y por el mucho uso que se
comprende se hizo del mismo para el estudio del derecho romano. Lo
demuestra la multitud de notas y glosas que tiene de diferentes
letras y épocas.
Los nueve libros están señalados en cada
folio con letras y números de colores. Todas las leyes tienen al
principio algún adorno de color; también están adornadas con
dibujos las iniciales de los comentarios. En las notas que se
pusieron posteriormente hay gran multitud de pequeñas figuras,
muy
caprichosas, que revelan el gusto de aquel tiempo.

Pero lo
más notable de este Códice son las viñetas del principio de los
libros, de un estilo especial, distinto completamente de las que se
ven en los otros Códices.

64. TRATADO DE DERECHO CIVIL.
Un
volumen en folio grande, en papel cartulina, de 489 páginas. Es del
siglo XIV. No hay división de materias, ni está foliado este
Códice. Los asuntos se tratan en forma de casos que se proponen;
luego se explana el punto y se resuelve. Antes de cada caso se
indica la palabra o palabras con que principia la ley cuya doctrina
se va a exponer.
Comenzando por el prólogo, y por el caso que se
propone en la página 1.a se observa en todos los casos un
vacío o blanco, destinado a adornar la inicial del nombre con que
principia la ley; inicial que no llegó a ponerse en ninguno de los
blancos, y así han quedado, faltando por consiguiente la primera
letra.
No consta el nombre del autor. El final no está completo,
y faltan algunas hojas. Lo demás del Códice se halla en buen
estado; en el margen hay alguna nota de época más reciente.

65.
COMENTARIOS AL DECRETO DE GRACIANO. Un volumen en folio grande, en
pergamino, de 694 páginas. Es de últimos del siglo XIII o de
principios del XIV. Este Códice es muy semejante al de n.° 3; pero
en aquel está todo el texto de los cánones, y en este sólo se
indican las primeras palabras del cánon, y luego sigue la
explicación o glosa.
Las Distinciones y las Causas están
señaladas en la parte superior de cada página, y además en el
margen. Todo el escrito es de mucho gusto, con profusión de hermosas
viñetas adornadas con planchas de oro. La viñeta del principio del
libro fue rasgada.
Después del último cánon de la parte 3.°,
de Consecratione, o sea al fin del libro, hay cuatro hojas
añadidas de distinta forma y tamaño, que al parecer pertenecieron a
algún otro Códice de derecho canónico. En las dos últimas hojas
están los árboles de consanguinidad y de afinidad; después
de este último árbol hay una nota que traducida del latín, dice:
«Concluye el árbol del Maestro Juan de Dios,
sacerdote español» Deo gratias.

66.
JUAN TEUTÓNICO. SUMA DE CONFESORES.
Un volumen en folio grande,
en pergamino, de 656 páginas. Es del siglo XIV. Está dividido en
cuatro libros, que se subdividen en títulos. Unos y otros se indican
con iniciales y números (nú-ros en dos líneas en el original)
de colores en la parte superior de cada página. Los capítulos y
resúmenes de lo que se trata se señalan antes del texto con letras
encarnadas.
Este Códice todavía es más notable que el
anterior, por el grande número de viñetas y de letras adornadas con
dibujos y planchas de oro. Además se distingue del otro, en que en
la mayor parte de las viñetas hay dibujos de caras de hombres, de
santos, etc. Es de sentir que en las muchas vicisitudes que han
pasado estos Códices, se rasgase en el que nos ocupa la viñeta que
había en la portada, y las que estaban al principio de cada uno de
los libros en que se divide esta obra. Aún se ha salvado en el
primer folio una figura que representa al autor, vestido de
religioso dominico, escribiendo el libro. En la nota que hay
al fin se designa á éste con el nombre de Fray Tentónico,
de la orden de Frayles predicadores. Después del libro
cuarto, que es el último, hay unos índices muy completos.

67.
LOS LIBROS DEL LEVÍTICO, NÚMROS Y DEUTERÓNOMIO.
Un
volumen en folio mayor, en pergamino, de 373 páginas. Es de
principios del siglo XIII. Este Códice es muy parecido al de n.°
61, y forma parte de la colección que hay de libros de la Sagrada
Escritura. También tiene los comentarios de Rábano Mauro. Al
principio de cada uno de dichos tres libros está un prólogo y una
preciosa viñeta, menos en el libro primero de donde se rasgó.
Los
capítulos en que se dividen los libros están señalados en el
margen con números de colores. Las iniciales de cada capítulo
ostentan dibujos de muy buen gusto, y todo el Códice se halla
escrito con mucha perfección.

68. MILELOQUIO DE SAN AGUSTÍN,
compilado por Fr. Bartolomé de Urbino, llamado así porque
era Obispo de dicha ciudad. Un volumen en folio grande, en
pergamino, de 816 páginas. Al principio tiene una Tabla o índice
alfabético de todos los asuntos que se exponen por orden alfabético,
lo mismo que un diccionario. Al fin hay una indicación de las
materias que pueden adoptarse para los sermones (ser- sermones en
dos líneas en el original
) de varias festividades y de algunos
santos.
Como en los Códices anteriores, las iniciales de los
capítulos están adornados con dibujos. También hay algunas viñetas
que sirven de orla a toda la página, especialmente en los últimos
folios.
El autor pertenecía a la orden de Ermitaños de San
Agustín
. Ahí consta en una nota que hay al fin, antes de los
índices, que traducida dice: «Concluye el Mileloquio de San
Agustín, compilado por Fray Bartolomé de Urbino, de la orden
de Frailes Ermitaños de San Agustín
» Y en la última página
hay otra que dice: «Este libro ya ha sido escrito. El que lo
escribió sea bendito.»

69. PONTIFICAL ROMANO. Un volumen en
4.° mayor, en pergamino, de 304 páginas. Es del siglo XIV.
Atendiendo al objeto para que fue destinado este Códice, que eran
las funciones pontificales, se escribió con gran lujo. Llaman la
atención las letras de adorno, y las preciosas viñetas con figuras
y dorados, que aún conservan el mayor brillo. Al principio hay un
índice hecho en época posterior, y seis hojas que si bien tratan de
la misma materia que lo demás del libro, se comprende que fueron
agregadas, pues son de diferente letra y no están foliadas como el
Códice.
En el margen hay algunas notas. También se ve alguna
oración añadida posteriormente. Como la mayor parte de los actos
para los cuales se escribió este Códice eran solemnes, hay algunos
signos de música.

70. COMENTARIOS AL DECRETO DE GRACIANO. Un
volumen en 4.° prolongado, en cartulina, de 322 páginas. Es del
siglo XIII. Está incompleto y muy deteriorado. Al principio le
faltan algunas hojas, y al final deben faltarle muchas, pues tan sólo
comprende hasta la Causa XI de la segunda parte del Decreto de
Graciano, y esta parte tiene XXXVI Causas. También le falta la
tercera parte, de Consecratione.
No consta quien es el
autor de estos Comentarios. En las Distinciones, que forman la
primera parte, no hay señal alguna que indique su numeración,
porque si bien en el margen se ven algunos números, son poco
legibles.
Las Causas están numerados en la parte superior de
cada página.

71. COMENTARIOS SOBRE EL LIBRO I DEL MAESTRO DE
LAS SENTENCIAS.
Un volumen en 4.° mayor, en pergamino, de 204
páginas. Es del siglo XIV. En el margen hay algunas notas y citas
que se refieren a varios capítulos del libro. Al final se ve una
tabla o índice, que expresa las cuestiones que se proponen en las
cuarenta Distinciones de que consta el libro.
Después hay una
nota con el nombre del autor, que traducida dice: «Concluye la Tabla
del primero, de Fray Pedro de Atarrabia de la orden de Frailes
menores.» Deo gratias. Amen.






140-147




140.
MISAL. Un volumen en 4.° mayor, en pergamino, de 266 páginas. Es
del siglo XIII. Al principio tiene un Calendario; pero le faltan los
meses de Noviembre y Diciembre. En el margen del mismo están
señalados los días egipcíacos. En la página que precede al
Calendario, están escritas de letra más moderna las oraciones que
dice el sacerdote al ponerse los sagrados ornamentos, en las
cuales son de notar algunas pequeñas diferencias respecto de las que
se dicen actualmente.
Según la costumbre de los Misales de aquel
tiempo, en este también están dibujadas antes del Cánon las
imágenes del Cristo y del Salvador, con las figuras y alegorías
de que se ha hecho mención en otros Misales. El que nos ocupa está
bien conservado, y tiene las iniciales de los capítulos y párrafos
adornadas con dibujos de colores según el estilo de aquel siglo.


141. MARSILIO DE PADUA. Un volumen en 4.° mayor, en
pergamino, de 200 páginas. Es del siglo XIV. Su autor llamado de
Padua porque naciò en dicha ciudad, floreció a
últimos del siglo XIII o principios del XIV. fue un célebre
político y jurisconsulto. Una de sus principales obras
es la que contiene este Códice. Se titula «El defensor de la paz»
porque expone la grave cuestión acerca la potestad del Papa y
del Emperador.
Toda la materia se explica seguidamente sin
haber divisiones de tratados; tan sólo en la parte superior de cada
página hay una sencilla indicación del número de la cuestión que
allí se expone.
Al final hay un resumen o índice de los
asuntos.

142. ARISTÓTELES. Un volumen en 4.° mayor, en
pergamino, de 142 páginas. Es del siglo XIII. Contiene los ocho
libros phisicorum de aquel filósofo. Al principio hay tres
folios que no pertenecen a este Códice. El primero y segundo libro
tienen una inicial que manifiesta comenzar allí el tratado; en los
demás libros quedó esto por hacer, y sólo se conoce el principio
del libro por el blanco que allí se ve. De todos modos los libros
están bien indicados con números de color en la parte superior de
cada folio. Hay notas en el margen de letra muy diminuta y clara;
algunas son de época posterior a la del Códice. También las hay
entre las líneas, especialmente en los últimos folios.

143.
FRANCISCO DE MAIRON Y OTROS AUTORES. Un volumen en folio en
pergamino, de 214 páginas. Es del siglo XV. Contiene primeramente un
trabajo del expresado autor, cuyo título traducido del latín dice:
«Flores extractadas de los libros de la Ciudad de Dios de San
Agustín, y reducidas a la forma de verdades, por el Doctor en
sagrada Teología, el venerable Maestro don Francisco de Mairon,
añadiendo muchos documentos y argumentos teológicos, etc.»
Se
divide en 22 libros, que se indican en números muy pequeños en la
parte superior de cada folio.
Sigue un tratado del Maestro
Nicolás Oresme, de communicatione idiómatum.
Otro
de Retórica, cuyo autor no consta.
Otro que se titula, dici
de omni
, según la mente de Aristóteles y demás filósofos, por
el Doctor y Maestro Reverende Enrique de Hassia.
El sermón
que dicho Maestro Nicolás Oresme predicó delante del Papa
y de los Cardenales, la víspera de Navidad, que fue el
cuarto domingo de Adviento del año 1363, y segundo del
Pontificado de Su Santidad el Papa Urbano V.
El
sermón de San Francisco, que el Maestro Pedro de Ailliaco
predicó en la Universidad de París el año 1382.
La
carta de la Universidad de París al rey de Francia,
sobre el cisma, fechada la víspera de Pentecostés,
día 25 de Mayo del año 1394.
El libro titulado «del
hombre interior» compuesto por el Maestro Ricardo de San Víctor.


144. CONSTITUCIONES PAPALES DE ALEJANDRO III, Y OTROS DOS
OPÚSCULOS.
Un volumen en 4.° mayor prolongado, en pergamino, de
188 páginas. Es de últimos del siglo XII. En este Códice llama la
atención el contener materias tan distintas entre sí; pero según
hemos notado en algún otro Códice, se debe a la escasez de libros
de aquel tiempo, en que siendo tan costoso poderlos adquirir, se
coleccionaban varios opúsculos en un mismo Códice.
En el que
nos ocupa, primeramente están las Constituciones de Alejandro III
dadas la mayor parte en el Concilio Lateranense III.
Después
la Filosofía del Maestro Guielmo de Conchis. Trátase
en ella de la sustancia creatriz, de los elementos, del caos, del
sistema planetario, que se explica con mucha extensión y con
multitud de figuras y círculos. También se trata de la tierra, de
los animales, etc.
Por último, hay un breve opúsculo que
comprende cuatro folios, y se titula traduciéndolo del latín:
«Libro de Cirujía según Constantino el Africano».


145. BREVIARIO. Un volumen en 4.° mayor, en pergamino, de
600 páginas. Es del siglo XIV. Este Breviario es de los más
completos que existen el archivo. Por el estado en que se halla se
comprende que prestó gran servicio en su tiempo. Tiene varios himnos
con notas de música, siendo de notar que algunos son
distintos de los que se usan actualmente.
En el oficio de la
Santísima Virgen
las lecciones del primer Nocturno no son
de la Sagrada Escritura, sino de un Santo Padre.
Dicho
Breviario como los otros de su clase, está escrito con gran
profusión de dibujos en las iniciales de cada capítulo. Al
principio tiene un Calendario en el que falta una hoja que comprende
los dos primeros meses.

146. SAN GREGORIO MAGNO. Un volumen
en folio, impreso en papel cartulina, de 672 páginas. Es de últimos
del siglo XV. Contiene la obra de dicho Santo Padre titulada Moralia.

Este libro es de los llamados incunables;
nombre con que se designan los libros impresos desde que se inventó
la imprenta hasta principios del siglo XVI.
Contiene un prólogo
del Obispo Brixiense. Después sigue un índice alfabético
que ocupa catorce folios. En el primer folio hay una nota manuscrita
que dice: Sedis Dertusae.
Y en el margen se ven algunas
notas, también manuscritas, que abundan más en los primeros
libros en que se divide esta obra.
Al fin hay un párrafo que
traducido del latín dice lo siguiente: «Ha sido concluida esta obra
de los Morales de San Gregorio Papa, corregida y enmendada
diligentísimamente por D. Bartolomé Cremon, Canónigo
regular
, impresa en Venecia por Reynaldo de Novimagio
Teutónico
, año del Señor 1480, el día 14 de Junio,
siendo Presidente de Venecia el ínclito Duque Juan
Mozenigo

Y en el folio último hay una página manuscrita
donde se dan algunas explicaciones sobre este libro.

147.
TRATADO ASCÉTICO. Un volumen en 4.° escrito parte en cartulina y
parte en pergamino, de 346 páginas. Es del siglo XV. Contiene varios
tratados o meditaciones sobre la Pasión del Señor. No
consta quien es el autor. Según parece, en este Códice tan sólo
hay una parte de la obra, que es la segunda, pues en las primeras
líneas dice traducido del latín: «Comienza aquí la segunda parte
de
esta obra, que fue compuesta en honor de la memoria de la
Pasión del Señor».
Siguen luego las meditaciones, sirviendo de
principal tema las siete palabras que dijo el Salvador, y se indican
con números en la parte superior de las páginas. La división de
los asuntos está señalada con iniciales de color.








36-40

36. CÓDIGO
DE JUSTINIANO. Un volumen en folio en pergamino, de 418 páginas. Es
de principios del siglo XIII. Contiene los IX primeros libros de
dicho Código. Le faltan algunas hojas del principio; el final está
completo. Al examinar este Códice se comprende el mucho uso que se
hizo de él en su tiempo para el estudio y para la enseñanza, pues
obsérvase que todas las hojas están muy manoseadas. 



Pero lo que
principalmente llama la atención, es el extraordinario número de
glosas o comentarios que se ven en el margen; que la mayor parte
parecen del mismo tiempo en que se escribió el texto. También hay
notas de diferentes épocas, escritas con caracteres sumamente
pequeños, muchas de las cuales están entre las líneas.
Además,
todas las leyes de este Código, que son innumerables, tienen algún
adorno o dibujo de colores; y al principio de los libros en que está
dividido, hay en letras de colores alguna alusión al emperador
Justiniano; diciendo por ejemplo: Imperator Máximus, ú
otro nombre equivalente.

37. JUAN GUALENSE, de la orden de
Frailes menores. Un volumen en 4.° prolongado, en pergamino, de 258
páginas. Consta de dos partes. La primera, que comprende hasta la
página 180, contiene la Suma o resumen de las Colecciones de los
Frailes menores. Se halla dividida en distinciones, y estas
subdivididas en partes. Después de los dos primeros folios, donde
está el plan o distribución general de la obra, hay
un prólogo. En el inventario de los Sres. Denifle y Chatelain
consta que esta obra también se halla en el Catálogo de la
biblioteca de Santa Genoveva, tomo I, p. 155,
manuscrito 251, y en varias otras bibliotecas. Hace mención
de la la misma el Bibliógrafo Sbaralea, en su
Suplemento, página 429.
La segunda parte trata de la
«Vida y costumbres de los filósofos» Este Códice está escrito en
letras muy correctas, y también se hallan adornadas con dibujos de
colores las iniciales de cada capítulo o párrafo.

38.
CONCORDANCIAS DE LA BIBLIA.
Un volumen en folio grande, en
pergamino, de 688 páginas. Es del siglo XIII.
Contiene tan sólo
las concordancias que se comprenden desde la letra H hasta la O
inclusive. Al fin del Códice hay una nota que traducida dice:
«Concluye la letra O.» Es de creer que la obra estaba dividida en
otros dos tomos, que debían comprender las letras anteriores y
posteriores a las de este
Códice.

39. BERNARDO DE
PARENTINIS. TRATADO ÚTIL SOBRE EL OFICIO DE LA MISA.
Un tomo en
4.° menor, en pergamino, de 220 páginas. Es del siglo XIV. Le
precede un prólogo. Antes de este tratado hay otro más breve
escrito en ocho folios de papel cartulina, que contiene como en
resumen todo lo que debe observarse en la celebración de la Misa.
Esta especie de cuaderno que se añadió al Códice, se conoce que
fue escrito para instrucción del clero de esta diócesis, pues en la
línea 13 de la página tercera se leen las palabras in Episcopatu
dertusensi
.

Lo demás que constituye el asunto principal
del libro está dividido en capítulos. Al final hay un largo índice.
En la última página se ve una nota de letra encarnada y muy
antigua, que traducida dice: «Este libro es de Fray (sigue un nombre
raspado que no es posible leer) de la orden de Predicadores.»
En
este Códice están adornadas con dibujos de colores todas las
iniciales de los capítulos y párrafos. Hay otro ejemplar en la
Biblioteca de Chartres, manuscrito 423.

40.
COLECCIÓN DE CÁNONES DEL PAPA ALEJANDRO III. Un volumen en 4.° en
pergamino, de 180 páginas. Es de últimos del siglo XII o de
principios del XIII. En la portada le faltan algunas hojas; el final
está completo.
Respecto al motivo de haberse coleccionado
separadamente los cánones o decretos del Papa
Alejandro III, que ya se hallan en las Decretales de Gregorio IX,
tal vez fue para dividir las materias en aquel tiempo en que el
precio de los libros era tan crecido,
Se observa en este Códice
y en casi todos los más antiguos, que en el margen de las hojas hay
muchos puntos agujereados. Según parece, servían de guía
para escribir las líneas, hasta que más adelante se
introdujo el uso del lápiz.
Al fin del libro hay unos
curiosos versos en latín, escritos de otra mano y probablemente en
diferente época. Cada verso se refiere sucesivamente a la Gramática,
Dialéctica, Retórica, Aritmética, Geometría, Música y
Astronomía. Luego siguen otros versos en la misma forma, alusivos a
Prisciliano, Tulio, Pitágoras, Ptolomeo y algunos otros filósofos.