APÉNDICES.
Concluida la reseña de los Códices, parécenos oportuno
insertar los Apéndices que están al fin del inventario de los Sres.
Denifle y Chatelain, y que según verán nuestros lectores, contienen
fragmentos muy interesantes copiados de dichos Códices.
Entre
ellos ocupa un principal lugar por su extensión el que pertenece al
Códice de número 6, que contiene como es de ver en el Catálogo, la
exposición del Símbolo de los Apóstoles por el célebre dominico
español Fray Raimundo Martín, que vivió a mediados del
siglo XIII.
Atendiendo a que hasta el presente no hay noticia de
que exista otro ejemplar en las bibliotecas de Europa, su contenido
ofrece un doble interés. Por otra parte, los Sres. Denifle y
Chatelain tuvieron buen cuidado en escoger los mejores fragmentos del
citado Códice; y sobre todo, nada omitieron de cuanto se pueda
referir a los sarracenos y judíos, y a los
escritores árabes. Así lo expresan en el prólogo de dicho
Apéndice, que es el de número I°.
Pero antes de los Apéndices
copiaremos la siguiente introducción, que precede a su inventario
latino.
ECCLESIA cathedralis urbis
Dertusae (nunc Tortosa dicunt) in Catalonia,
cujus historiam ac fata nuper enarravit D. Ramón O'Callaghan,
canonicus archivistaque ejusdem, a restabilito saltem
episcopatu an. 1151, multos pretiososque codices
possedit. Quanquam autem, post varias vicissitudines, non tot hodie
percurrere licet quot inventariis saeculo XV sequentibusque usque ad
saec. XVIII confectis seu exaratis enumerantur, restat adhuc
collectio nec infima nec spernenda. Quam cum alter nostrum bis
visitavisset codicum statum lamentabilem, asseribus avulsis,
deploraverat, nihilque magis cupiebat quam ut iterum Dertusam
adeundi occasionem haberet, brevemque librorum superstantium
descriptionem conficeret.
Itaque hujus anni mense Septembri, post
exploratum tabularium Barcinonense, ambo Dertusam
provolavimus. Tempus fortasse non optime elegeramus; namque improviso
advecti, urbem vittis, vexillis, floribusque ornatam, musicis
concursibus occupatam (ut fit quottanis ad celebrandum S.
cincturae B. M. Virg. festum), denique festivitatibus magis
quam labori paratam invenimus. Praeterea infelici casu tunc
archivista aeger lectum retinebat. Nihilominus, intercedente
fr. Angelo A. Ciarán, O. P., qui acriter in illis sollemnibus
vastam praedicatione sua cathedralem movebat,
comiter
a canonicis porta tabularii nobis aperta fuit,
ibique commodissime codices inspiciendi, describendi, immo
photografandi licentia concessa est. Praeter
libros capitulares, duo armaria codicibus 147
referta invenimus; qui quidem jam uniformiter dorso e pelle
ovina flavi coloris tabulisque linteolo spissius flavescente
coopertis vestiti, temporum injurias vincent.
Tres dies ibi
commorati, raptim singulos libros unus vel alter inspeximus.
Numeri jam in singulis positi curam habuimus, etsi ordo melior non
aegre dari potuisset. Exempli gratia, Biblia fere integra cum
commentario Rabani nunc inter numeros 67, 61, 2, 28, 12
distrahitur. At non nostrum erat praefixam seriemt urbare (seriem
turbare), et facile minimum id vitium indice nostro
resarcietur. Deest praeterea quasi generatim in codicibus
numeratio foliorum.
Non ingratum erit lectoribus
in Appendice recipere quaedam hucusque incognita et quaedam
specimina codicum antiquiorum.
Grates imo corde agimus
canonicis Dertusensibus, qui nobiscum ut cum amicis,
non ut cum externis et advenis agebant, nobisque thesaurum
cathedralis, inter alia calicem mirifici operis, á
Papa Luna, i. e. Benedicto XIII, donatam monstrarunt.
Denique veniam á collegis nostris doctisque oramus, si quid in
hoc inventario, quod sine auxilio librorum impressorum
conficiendum fuit, nos fugerit vel in errores nos traxerit. Neque
silentio praetereundum, multes codices in principio mutilos
esse, quod laborem nostrum detinuit. Caetera
non catalogum
integrum condere, sed saltem praecipuorum tractatuum
inventarium non inutile parare ambitio nostra fuit.
Dertusae, 4 sept. 1895.
HENRICUS DENIFLE, O.
P.
AEMILIUS CHATELAIN.
appendix I
140.
MISAL. Un volumen en 4.° mayor, en pergamino, de 266 páginas. Es
del siglo XIII. Al principio tiene un Calendario; pero le faltan los
meses de Noviembre y Diciembre. En el margen del mismo están
señalados los días egipcíacos. En la página que precede al
Calendario, están escritas de letra más moderna las oraciones que
dice el sacerdote al ponerse los sagrados ornamentos, en las
cuales son de notar algunas pequeñas diferencias respecto de las que
se dicen actualmente.
Según la costumbre de los Misales de aquel
tiempo, en este también están dibujadas antes del Cánon las
imágenes del Cristo y del Salvador, con las figuras y alegorías
de que se ha hecho mención en otros Misales. El que nos ocupa está
bien conservado, y tiene las iniciales de los capítulos y párrafos
adornadas con dibujos de colores según el estilo de aquel siglo.
141. MARSILIO DE PADUA. Un volumen en 4.° mayor, en
pergamino, de 200 páginas. Es del siglo XIV. Su autor llamado de
Padua porque naciò en dicha ciudad, floreció a
últimos del siglo XIII o principios del XIV. fue un célebre
político y jurisconsulto. Una de sus principales obras
es la que contiene este Códice. Se titula «El defensor de la paz»
porque expone la grave cuestión acerca la potestad del Papa y
del Emperador.
Toda la materia se explica seguidamente sin
haber divisiones de tratados; tan sólo en la parte superior de cada
página hay una sencilla indicación del número de la cuestión que
allí se expone.
Al final hay un resumen o índice de los
asuntos.
142. ARISTÓTELES. Un volumen en 4.° mayor, en
pergamino, de 142 páginas. Es del siglo XIII. Contiene los ocho
libros phisicorum de aquel filósofo. Al principio hay tres
folios que no pertenecen a este Códice. El primero y segundo libro
tienen una inicial que manifiesta comenzar allí el tratado; en los
demás libros quedó esto por hacer, y sólo se conoce el principio
del libro por el blanco que allí se ve. De todos modos los libros
están bien indicados con números de color en la parte superior de
cada folio. Hay notas en el margen de letra muy diminuta y clara;
algunas son de época posterior a la del Códice. También las hay
entre las líneas, especialmente en los últimos folios.
143.
FRANCISCO DE MAIRON Y OTROS AUTORES. Un volumen en folio en
pergamino, de 214 páginas. Es del siglo XV. Contiene primeramente un
trabajo del expresado autor, cuyo título traducido del latín dice:
«Flores extractadas de los libros de la Ciudad de Dios de San
Agustín, y reducidas a la forma de verdades, por el Doctor en
sagrada Teología, el venerable Maestro don Francisco de Mairon,
añadiendo muchos documentos y argumentos teológicos, etc.»
Se
divide en 22 libros, que se indican en números muy pequeños en la
parte superior de cada folio.
Sigue un tratado del Maestro
Nicolás Oresme, de communicatione idiómatum.
Otro
de Retórica, cuyo autor no consta.
Otro que se titula, dici
de omni, según la mente de Aristóteles y demás filósofos, por
el Doctor y Maestro Reverende Enrique de Hassia.
El sermón
que dicho Maestro Nicolás Oresme predicó delante del Papa
y de los Cardenales, la víspera de Navidad, que fue el
cuarto domingo de Adviento del año 1363, y segundo del
Pontificado de Su Santidad el Papa Urbano V.
El
sermón de San Francisco, que el Maestro Pedro de Ailliaco
predicó en la Universidad de París el año 1382.
La
carta de la Universidad de París al rey de Francia,
sobre el cisma, fechada la víspera de Pentecostés,
día 25 de Mayo del año 1394.
El libro titulado «del
hombre interior» compuesto por el Maestro Ricardo de San Víctor.
144. CONSTITUCIONES PAPALES DE ALEJANDRO III, Y OTROS DOS
OPÚSCULOS.
Un volumen en 4.° mayor prolongado, en pergamino, de
188 páginas. Es de últimos del siglo XII. En este Códice llama la
atención el contener materias tan distintas entre sí; pero según
hemos notado en algún otro Códice, se debe a la escasez de libros
de aquel tiempo, en que siendo tan costoso poderlos adquirir, se
coleccionaban varios opúsculos en un mismo Códice.
En el que
nos ocupa, primeramente están las Constituciones de Alejandro III
dadas la mayor parte en el Concilio Lateranense III.
Después
la Filosofía del Maestro Guielmo de Conchis. Trátase
en ella de la sustancia creatriz, de los elementos, del caos, del
sistema planetario, que se explica con mucha extensión y con
multitud de figuras y círculos. También se trata de la tierra, de
los animales, etc.
Por último, hay un breve opúsculo que
comprende cuatro folios, y se titula traduciéndolo del latín:
«Libro de Cirujía según Constantino el Africano».
145. BREVIARIO. Un volumen en 4.° mayor, en pergamino, de
600 páginas. Es del siglo XIV. Este Breviario es de los más
completos que existen el archivo. Por el estado en que se halla se
comprende que prestó gran servicio en su tiempo. Tiene varios himnos
con notas de música, siendo de notar que algunos son
distintos de los que se usan actualmente.
En el oficio de la
Santísima Virgen las lecciones del primer Nocturno no son
de la Sagrada Escritura, sino de un Santo Padre.
Dicho
Breviario como los otros de su clase, está escrito con gran
profusión de dibujos en las iniciales de cada capítulo. Al
principio tiene un Calendario en el que falta una hoja que comprende
los dos primeros meses.
146. SAN GREGORIO MAGNO. Un volumen
en folio, impreso en papel cartulina, de 672 páginas. Es de últimos
del siglo XV. Contiene la obra de dicho Santo Padre titulada Moralia.
Este libro es de los llamados incunables;
nombre con que se designan los libros impresos desde que se inventó
la imprenta hasta principios del siglo XVI.
Contiene un prólogo
del Obispo Brixiense. Después sigue un índice alfabético
que ocupa catorce folios. En el primer folio hay una nota manuscrita
que dice: Sedis Dertusae.
Y en el margen se ven algunas
notas, también manuscritas, que abundan más en los primeros
libros en que se divide esta obra.
Al fin hay un párrafo que
traducido del latín dice lo siguiente: «Ha sido concluida esta obra
de los Morales de San Gregorio Papa, corregida y enmendada
diligentísimamente por D. Bartolomé Cremon, Canónigo
regular, impresa en Venecia por Reynaldo de Novimagio
Teutónico, año del Señor 1480, el día 14 de Junio,
siendo Presidente de Venecia el ínclito Duque Juan
Mozenigo.»
Y en el folio último hay una página manuscrita
donde se dan algunas explicaciones sobre este libro.
147.
TRATADO ASCÉTICO. Un volumen en 4.° escrito parte en cartulina y
parte en pergamino, de 346 páginas. Es del siglo XV. Contiene varios
tratados o meditaciones sobre la Pasión del Señor. No
consta quien es el autor. Según parece, en este Códice tan sólo
hay una parte de la obra, que es la segunda, pues en las primeras
líneas dice traducido del latín: «Comienza aquí la segunda parte
de
esta obra, que fue compuesta en honor de la memoria de la
Pasión del Señor».
Siguen luego las meditaciones, sirviendo de
principal tema las siete palabras que dijo el Salvador, y se indican
con números en la parte superior de las páginas. La división de
los asuntos está señalada con iniciales de color.