Mostrando entradas con la etiqueta obispo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta obispo. Mostrar todas las entradas

viernes, 21 de febrero de 2020

LXXXII, legajo cartas reales, 115, 19 octubre

LXXXII.
Leg. de cartas reales. Núm. 115. 19 oc. Sin año.

Muyt alto rey e virtuoso senyor. - Mi senyor el infant por la gracia de Dios es bien sano e continuadament entiende en caça e en toda art de cavelleria assi que nunqua cessa quando caçando quando cavalquando quando juguando a la ballesta de que es buen maestro: quando todo falle faciendo pelear el osso con los perros en manera que a la tarde el cae cansado. De que partie en Mirales otras nuevas de Napols no ya sino que es cierto dona Juana haver preso por marido el comte de la Marcha qui el primer dia se fiço clamar rey de Napols: tiene preso el comte camarlench al qual ha turmentado muchas veguadas. Assimismo tiene preso a un capitan qui ha nombre Sforça. Dicese que el ermano del comte camarlench qui tenia algunos castiellos por el dito comte ses revellado cuentra el dito comte de la Marcha et algunos otros barones de Calabria no quieren ir a veyer el dito comte de la Marcha: presume hombre que sera guerra entre ellos. Exalçe nuestro senyor Dios la vuestra corona a su santo servicio. Scripta en Cathania a XIX de octubre. - Del vuestro humil subdito qui se comanda en gracia e merce de la vuestra senyoria el vispe de Guescha. (obispo de Güesca: Huesca).

lxxxiii-reg-1111-fol-47-20-agosto-1337

domingo, 28 de abril de 2019

EL OBISPO DE ZARAGOZA ANTE LA CONQUISTA MUSULMANA

8. EL OBISPO DE ZARAGOZA ANTE LA CONQUISTA MUSULMANA
(SIGLO VIII. ZARAGOZA)

Discurría el año 714, cuando el cerco de los hombres de armas que capitaneaba Tariq a punto estaba ya de conseguir la victoria sobre la importante ciudad de Cesaraugusta. Como quiera que ésta —amparada tras las gruesas murallas que construyeran los romanos— se defendía con bravura inusitada, aún se le unieron a aquél las tropas de Muza llegadas desde Toledo, de modo que el obispo zaragozano Bencio, ante la gravedad de la situación, reunió en la iglesia de Santa María la Mayor a los personajes más destacados de la ciudad para aconsejarles que abandonaran rápidamente la ciudad para ir a refugiarse en zonas más inaccesibles y seguras de las montañas pirenaicas.
Mientras se luchaba denodadamente en los muros, en la iglesia, en medio de aquella plática, un noble hispanogodo interrumpió al obispo en su arenga para advertirle que era él quien debía huir y poner a salvo las sagradas reliquias y el tesoro de la iglesia, no así los caballeros cristianos, que debían aprestarse a defender la ciudad hasta el final junto a sus hombres. Sin excepción, todos los allí presentes apoyaron con rotundidad la propuesta de aquel noble.
Así fue como el obispo Bencio, acompañado por dos de sus familiares, recogieron todos los bienes de valor, lo cargaron a lomos de varias mulas, y salieron por la puerta de Oriente en dirección a las montañas del norte, hacia Huesca, amparados por la escolta de los hombres de dos de los nobles presentes en la reunión.
Aquella fue una decisión que reflejaba perfectamente el ánimo de los cristianos, conocedores de lo que estaba sucediendo en todas las poblaciones que, una tras otra, caían en manos sarracenas. Lo cierto es que —según la leyenda— aún no habían transcurrido tres horas de la huida de la comitiva del obispo Bencio, cuando los musulmanes consiguieron derribar la puerta Cinegia y, entrando como una auténtica avalancha por sus calles y plazas, obligaron a las autoridades de Cesaraugusta a capitular.

[Sánchez Pérez, José A., El Reino de Aragón, págs. 81-82.]



Carrillo y Lamberto prolongan su episcopado hasta el año 700 o 701 nombrando como su sucesor a Bencio, a quien Risco considera un obispo ficticio.

http://books.google.es/books?id=HG4OAAAAQAAJ&pg=PA197