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domingo, 26 de julio de 2020

Capítulo LVIII, Álvaro de Cabrera, XV conde de Urgel

CAPÍTULO LVIII.

De don Álvaro de Cabrera, XV conde de Urgel y vizconde de Ager.
Venida de don Álvaro, y como por muerte de su hermano heredó su padre. - Del pleito que se movió entre el conde don Álvaro doña Constanza, su mujer, sobre la validez de su matrimonio.- De lo que hizo doña Cecilia de Foix, después que el conde volvió con doña Constanza de Moncada; y de lo que declararon los obispos de Francia.

Armengol, hijo mayor y primogénito de Ponce de Cabrera, conde de Urgel, murió pocos días después de los * su padre, y un sepulcro muy bien labrado, que está en * iglesia mayor de Castellón de Farfanya, al lado del *evangelio, con un simulacro de un niño encima de él, con * armas de Urgel, dicen ser suyo. La breve vida de * Armengol es ocasión que todos los escritores lo dejan * aunque fue señor del condado de Urgel y heredero del *padre, pero no gobernó, impedido por su menor edad: *durante esta, y por ser ya muerto Guerau de Cabrera, vizconde Cabrera, hermano de Ponce y tío de estos, Jaime de Cervera, caballero muy principal de Cataluña, cuidaba de to* y por sustitución hecha por el padre en favor de Álvaro * sucedió en el condado. Llamábase antes Rodrigo, y d* este nombre; mas aunque según el testamento del padre se * bía de llamar Armengol, porque quiso que cualquier de * hijos o nietos que llegase a ser conde de Urgel hubiera de * el nombre de Armengol, no obstante esto, se quedó con el * Álvaro, y así le hallo nombrado en todos los autos y memorias quedan de él. Nació en Castilla en el mes de *marzo del año 1239 en unas casas junto al monasterio de las Huelgas de Burgos, y fue bautizado en el dicho monasterio, y padrinas dos reinas, Juana, mujer de Fernando el Santo, rey de Castilla, y Leonor, mujer que fue de don Jaime, rey de Aragón (Jaime I). Crióse en aquellos reinos y al lado de don Rodrigo González de Girón, hermano de la condesa doña María, su madre, y heredó gran parte del estado de don Fernández de Castro, que fue bisabuelo suyo, por no haber quedado sucesión de don Fernán Ruiz de Castro, ni de doña Leonor Rodríguez, que también eran bisnietos de dicho don Pedro: vivió allá hasta edad de siete u ocho años, que le llevaron a Cataluña, por haber muerto su hermano; y hasta el año de 1253 no gozó las rentas del condado de Urgel, ni vizcondado de Ager, por lo que queda dicho arriba: acabado este tiempo, y siendo de edad de poco más de catorce años, casó con doña Constanza de Moncada, hija de don Pedro de Moncada y de doña Cecilia, su mujer. Fue este don Pedro hijo de don Guillen de Moncada y de doña Constanza, hija del rey don Pedro, y hermana de don Jaime el primero, rey de Aragón. Era la novia, cuando casó, de edad de poco más de diez años: el dote fueron sex mille aurei, nombre muy usado en la moneda de aquellos tiempos: dice el padre Diago que eran seis mil ducados; pero yo entiendo que no eran sino florines, y eran de peso cada uno de ellos de sesenta y ocho granos, y de oro de diez y ocho quilates,
y según los tiempos recibían el valor, y al tiempo que escribió el dicho padre Diago valían (si usara esa especie de moneda) doce reales, y así les da el dicho autor el nombre de ducados (se lee ducadós, igual esa tilde es una mancha). En el archivo real de Barcelona, en el libro de las Conclusiones Civiles del año 1595, fol. 297, hay una conclusión que dice, que quinientos áureos valen seis mil *libras barcelonesas. Según he visto en memorias de estos tiempos * dio el rey mil morabatines a don Pedro, para ayudar * paga de este dote, por ser la novia parienta suya muy cercana: celebróse la boda en la villa de Seros que era de * Pedro de Moncada, a 24 de junio, día de San Juan Bautista * de este año 1253; y fueron velados en la puerta de la iglesia de la villa, por fray Berenguer de Gatell, del orden de San Francisco. Estuvieron muy vergonzosos los novios, * las preguntas ordinarias que les hacía el sacerdote, *respondía por el conde Jaime de Cervera; y enfadado de ello el
sacerdote, le dijo que él no casaba a doña Constanza co* sino con el conde, y él entonces respondió a lo que le *preguntaba el sacerdote, y fueron desposados. La bendición * misa celebró el mismo sacerdote, y predicó fray Berenguer Desbach, del orden de Santo Domingo, y prior del convento de Lérida: el tema del sermón fue quasi stella matutina, *.
Fue muy regocijado y solemne este desposorio, y ha* acudido en Seros mucha nobleza de Cataluña y Aragón * todos o los más vasallos del conde y de don Pedro, *para
solemnizar la boda (que tan reñida fue): de la iglesia fueron al castillo, con mucho acompañamiento, y allá hubo *un grandioso banquete.
La primera noche durmieron separados los novios, porque así lo quiso la madre de doña Constanza: debió temer *la poca edad de los dos. Vivieron algunos días en Seros, si*
que el conde tratase de llevarse la novia, con pretesto de que no se le había pagado íntegramente la dote que se le había prometido, y continuaron de esta manera dos años,
poco menos: el conde mostraba disgusto del casamiento * lloraba, diciendo que don Pedro de Moncada y su hija le tenían preso; y aconsejado de algunos, ponía duda si aquel casamiento era válido o no, alegando que él cuando casó solo tenía doce años, y la novia diez; los suegros atajaron estas pláticas, conociendo el mal que podía suceder de ellas, e hicieron que ratificasen el matrimonio delante del abad de Fontfreda, que también era abad del monasterio de Escarp, del orden cisterciense, que está entre Segre y Cinca. Esta ratificación hizo el conde con pacto que se le pagase la dote íntegramente, y después sobre la paga hubo entre suegro y yerno muchos dares y tomares, y mientras
se tardaba a pagar, dio don Pedro a don Álvaro la villa de Mequinenza, que la poseyó más de año y medio, con toda la jurisdicción y dominio que en ella tenía don Pedro de Moncada; y al tomar posesión, dice una memoria antigua, que un hombre del conde subió en una torre, y con grandes gritos decía: Urgel, Urgel, por el conde. Esto no aquietó a don Álvaro; antes bien no pasó mucho tiempo que volvió a decir que él no era casado, porque el matrimonio no fue consumado, y que él era soltero, y que doña Constanza y él estaban cada uno en su libertad, y les era lícito casar a su albedrío; y como a los príncipes y señores jamás les faltan aduladores y malos consejeros, aquí los hubo más de lo que era menester. Jaime de Cervera y otros, que debieran darle buen consejo, eran los que más le incitaban y llevaban por la parte que más gustaba: si decía que el matrimonio no era válido, todos lo afirmaban, y si decía que quería casar con otra, todos a porfía le hallaban casamiento, y ya quería casarse con otra. Doña Constanza y sus padres, con cuidado, estaban a la mira, aguardando en qué había de parar aquello. Jaime de Cervera le aconsejó que pidiera por mujer una hija de Berenguer de Anglesola, llamada *Sibila (no se lee) el conde lo escuchó de buena gana, y dijo que casaría * ella o con otra cualquiera que le hablasen, con tal * quedase libre de don Pedro y doña Constanza: trazó Jaime de Cervera el casamiento con Berenguer de Anglesola, * prometió que por parte del conde se cumplirá todo * que ellos tratasen; concertóse la dote, y en Lérida se *cortaron los vestidos a la novia; señalóse día para la boda * ya la comida estaba aparejada y todos aguardando el conde * que estaba a la otra parte del río Segre y venía para celebrar
la boda. Iba con él Jaime de Cervera, y a la *que fueron a la vega de Menargues, el conde se tomó a *llorar muy amargamente, diciendo, que ya no quería casar con la hija de Berenguer de Anglesola, sino con la hermana del conde de Foix, que yo entiendo que no la había *visto. El Cervera, enfadado de aquella rapacería, le dijo, que en su nombre y con voluntad suya había dado palabra * cumplir este casamiento, y que era mal caso que *ahora que todos le aguardaban, saliese con esto; púsole delante * razones, pero todo fue vano, porque él pensaba en su *nion, y no quería sino la hermana del conde de Foix.
S* esto Berenguer de Anglesola, y enfadado de ello, dijo un * tigo que dijo: se nolle dare amasium filiae suae.
Doña Constanza había ya dado queja al arzobispo de Tarragona de lo que pasaba, y él despidió de su corte * letras al conde y don Berenguer de Anglesola, y así * casamiento no pasó adelante: el conde luego trató de * con doña Cecilia, hermana de Roger, conde de Foix; * segunda de Roger Bernat, conde de Foix, y la mayor, * llamaba Esclaramunda, casó con el vizconde de Cardona. Jaime de Cervera lo procuró con grandes veras; y porque el conde no conocía a la dama, sino por relación, los dos fueron a tomar vista, y el mancebo quedó muy enamorado. Tratóse el casamiento, y concordaron, al cabo de dos años y siete meses que había que estaba casado con doña Constanza. El conde de Foix ya tenía noticia de todo y rehusaba darle su hija; pero el conde, Jaime de Cervera, Berenguer de Anglesola, Ramón de Cervera, Berenguer Arnaldo y Berenguer Ramón de Ribelles, que todos eran servidores del conde y heredados en el condado de Urgel, juraron que el conde podía legítimamente cantratar (contraer, contratar) matrimonio con doña Cecilia, y que todo lo que había pasado entre él y doña Constanza no era bastante impedimento. El conde de Foix no se satisfizo de esto; hiciéronse tres amonestaciones en la iglesia mayor de Foix, y nadie contradijo, y dijo doña Cecilia en el proceso del casamiento, que lo que le movía a ella a tomar al conde por marido era que todos las que estaban en la iglesia decían que bien podía hacerse aquel matrimonio; y como por parte de doña Constanza no hubo contradicción, porque no tenía noticia de ello, quedó satisfecho el conde de Foix, y sin más averiguar, dio a su hermana por mujer al conde de Urgel.
En esta ocasión concertó Jaime de Cervera, que era muy amigo del conde de Foix y del vizconde de Castellbó, las diferencias que de muy antiguo tenían los condes de Urgel con aquellos señores, y le cedieron el derecho que tenían el conde don Álvaro y su hermano, y les podía pertenecer en los lugares de que se habían apoderado los condes de Foix y vizcondes de Castellbó, desde el castillo de Oliana, la ribera de Segre arriba, en el territorio de Urgellet, * ahora llaman la Seo de Urgel, y por la ribera de Bel* hasta el puerto del valle de Andorra, y desde el *collado de Arnalt hasta el que llaman de las Cruces y de la *narda, especialmente el castillo de Nargó y el valle de *bo, y el de Castellbó y la Ciudad, con los vallesde * Juan y de Andorra, y con los castillos de Arrahen, y *ron por libre al conde de Foix de todo lo que poseía en el condado de Urgel, absolviéndole de cualquier reconocimiento que fuese obligado hacer. Esto pasó a la fin del *año 1256, en que este matrimonio se efectuó; y a más de * Jaime de Cervera, lo prometieron y se obligaron al cumplimiento de ello, don Ramón de Cervera, su hermano Berenguer, Arnaldo de Anglesola, Bernat Ramón de *Ribelles y Ramón de Besora; y dice Zurita, que en esta ocasión Ramón de Cervera se quedó con la villa de Algerre, * era del condado de Urgel, y después sucedió en ella * Esclaramunda, su hija, y de doña Berenguera de Pinos * mujer, que fue hija de don Galceran de Pinós.
Fue el desposorio de doña Cecilia ocho días antes de Navidad, en la villa de Sellent; y en el mes de enero siguiente, en la villa de Monmagastre, recibieron la bendición * capitulóse ante G. de Murello, escribano de Balaguer, * dote fueron veinte y cinco mil sueldos melgarenses * fue la misma que se había dado a la otra hija, y corri* la provincia de Languedoc; y he observado que el rey Alfonso, (II) hijo de la reina doña Petronila y del conde de Barcelona (Ramon Berenguer IV), que fue marqués de la Provenza, todos los leg* que hizo a las iglesias del dicho marquesado son de esta moneda, y aun he yo visto en Cataluña contratos hechos es* moneda. Bertrán Elías de Pamias, en la Vida de Bernat primero, conde de Foix, dice que es lo mismo que la moneda de Barcelona: * (no se lee bien) erogataque militibus stipendia (quoscum habere adversus tolosatis vim oportuit) dena solidorum melgarensium (Barchinonensis moneta) pugilum millia eidem exsolverentur; y parece había de ser igual la moneda catalana y de aquellos condados, y aun de Languedoc, por facilitar el comercio había en estos tiempos.
Acabada la boda, se fueron los novios a Agramunt. El rey don Jaime y doña Constanza y sus padres tuvieron notable sentimiento de este hecho, el cual fue gran escándalo y malísimo ejemplo a todos estos reinos.
Puso doña Constanza pleito a su marido, delante de Bernardo, que era obispo de Urgel, y don Pedro de Moncada puso gente en campaña, que se juntó con la de don Guillen de Cardona, que era tío de la condesa, y estaba muy mal con el conde, por razón de cierta heredad que le había comprado el conde en el vizcondado de Ager, y pretendía habérsela de volver; por esto había tomado armas, y corría las tierras del condado de Urgel: estos juntos tomaron después la villa de Pons, y la quemaron. La condesa doña María, madre de don Álvaro, poseía las villas de Albesa y de Menargues, por razón de su dote y derechos, y estaba con continuo cuidado que estas guerras no diesen sobre estos dos pueblos, y los destruyesen: pidió favor al rey, el cual, a 5 de los idus de noviembre de 1259, le aseguró los dichos lugares y dio guiaje a los vecinos de ellos, prometiendo que las gentes de don Pedro de Moncada no harían daño alguno, no dando ellos causa: los demás lugares y pueblos padecían mil infortunios, y se cometían muchos delitos y homicidios, y ofensas a Dios; y a la que el obispo de Urgel empezaba a entender en la causa del matrimonio, la condesa pidió al papa Alejandro IV que le nombrase otro juez, porque ella ni los suyos no tenían paso seguro para ir al obispo, porque había de pasar por medio del condado de Urgel y entre sus enemigos, que debían impedir a los que iban y venían de ella al obispo; y el pontífice, a 11 de las calendas de marzo, año cuarto de su pontificado, y de Cristo * 1258, dio sus bulas dirigidas a don Domingo de Solá, obispo de Huesca, gran teólogo e insigne predicador, y le encargó la cognicion y justicia de esta causa, haciéndole juez de ell* en caso que fuese verdad que no tenía seguridad la condesa para proseguir su pleito delante del obispo de Urgel * por estar de por medio las tierras y estados del conde * presúmese ser esto verdad, porque el obispo de Urgel
*dejó la causa, y el de Huesca se quedó con ella. Encargó también el papa, que estrechase al conde sin incurso * apelación, y su tierra con entredicho, a dejar a doña Cecilia y cobrar a doña Constanza, su legítima mujer y esposa; y para la cognicion de la causa fue asignada la ciudad de Lérida, por ser lugar acomodado y vecino de las partes *
y porque se creyó que de cualquier interlocutoria o procedimiento que hiciese el obispo de Huesca se apelaría *daría de nulidad, y cada día saldrían mil estorbos que harían inmortal la causa, hicieron un auto el rey y el conde * que he visto en el archivo real, armario 16, saco T, a * 26 de las calendas de junio, año de la Encarnación 126* en que declaró el conde que aceptaba de buena gana por juez al obispo de Huesca, y que no pondría excepciones maliciosas en la causa, ni apelaría de ninguna declaración interlocutoria, sino es que fuese tal, que de no apelar de ella, corriese riesgo de perder el pleito; y que la causa se tratase en Lérida, prometiendo comparecer el día que fuese asignado y el juez le mandase, y daría a los asesores del obispo por sus salarios y derechos doscientos morabatines, y que en caso que el juez declarase en contra su pretensión, pueda apelar a la sede apostólica, y haya de estar a lo que allí * declarado por el sumo pontífice; y que si se declara *nulo el segundo matrimonio, haya de volver la dote que *había tomado de doña Constanza, y por eso obliga los castillos y pueblos de Balaguer, Pons y Agramunt; y quiere * no obedeciendo a la sentencia del pontífice, se queden * dichos castillos en poder del rey, hasta que haya obedecido; pero lo que no hacía el conde, impedido por este auto, hacía doña Cecilia, como veremos después. La causa * adelante, pero de modo, que se iba dilatando por parte del conde y de doña Cecilia, de manera que todos * conocían claro; y el rey se enfadó de ello más que to* y por asegurar al conde en su servicio, divertirle del * y domar su orgullo, le pidió las tenencias de los castillos de Agramunt, Balaguer, Linyola y Oliana, que * los pueblos más fuertes y mejores del condado, donde
* conde y los suyos se recogían; y el conde se los entregó, por estar obligado a ello y no serle permitido hacer otra cosa. Estas tenencias o posesión de castillos duraban diez días no *, y pasados aquellos, según costumbre de Cataluña, * el rey requerido, tenía obligación de volverlos a restituir. Pasados los diez días, el conde envió a Bernat Ramón de Ribelles al rey, suplicándole le volviese sus castillos, pues se los había entregado y se le habían de volver, a uso y costumbre de Barcelona y de Cataluña; pero el rey no quiso dar lugar a ello, aunque el conde ofrecía estar a derecho con él. Esto alteró mucho al conde, y se tuvo por muy agraviado, y envió a decir al rey, que mirase que le tenía por fuerza sus castillos, y que él no era hombre que hubiese de sufrir tan gran perjuicio y desheredamiento, * por esto, aunque le pesaba mucho, se salía de su obediencia *
del modo y forma que según derecho le era permitido, y p* esto le envió su carta de deseximent. (Eixir, eixí, eixida, eiximén; exit, exitus : salir, salida; surtida viene de sortie francés)
Estas tenencias que pidió el rey no fueron otra cosa que dispertar a quien dormía, porque los magnates y caballeros de Cataluña, que cuidaban poco de lo que pasaba entre el rey y doña Constanza y el conde, porque no les pertenecía ni les era interés, luego que el conde les * parte de la detención que hacía el rey de sus castillos, *dos se alteraron, porque los más de ellos estaban obligados a dar las tenencias siendo requeridos, y era mal * e interés común que quisiese el rey, pasados los *diez días, quedarse con ellas, y quedar ellos desheredados. * este negocio de manera, que por donde pensaba el rey asegurarse y aquietar al conde de Urgel, alborotó a todos los barones de Cataluña, y las armas que estaban en el condado y castillos de Urgel se derramaron por todo el principado, y cuando el rey lo quiso remediar, no pudo, porque ya todos estaban empeñados. Los que más se mostraban amigos y valedores del conde eran Ramón Folc, vizconde de Cardona, Berenguer de Anglesola, don Jaime de Cervera, Ramón de Cervera, don Guillen de Cervelló, don Hugo, * hermano, don Guerau de Cabrera, hermano del conde, Bernat Ramón de Ribelles, Guillen Ramón de Josa, Arnaldo de Juz y otros muchos; y todos se despidieron del rey, según el uso y estilo de aquellos tiempos.
El vizconde Ramón Folc era deudo muy cercano del conde y había estado a la mira de todo, y en esta ocasión se despidió del rey con quejas más particulares que los otros, porque el rey le había mandado que, en la guerra, no llevara fonévol, que era máquina de dar baterías de aquellos tiempos y a solos los reyes era lícito usar de ella, y había el

rey don Jaime, en el año 1226, en Tortosa, hecho una constitucion que lo impedía, exceptuando a los caballeros que tenían especial privilegio del dicho rey y de sus pasados; y le había mandado tapiar una puerta de la calle del castillo de Monblanc, por la cual estaban en posesión el vizconde y los suyos de entrar y salir, y lo juzgaba el vizconde por un *grande desheredamiento y perjuicio; y el rey daba toda la satisfacción que podía al vizconde, por apartarle del conde de Urgel, porque el rey se persuadía que todo lo que el conde hacía era con consejo suyo. En esta ocasión se fue el rey a Lérida, con pensamiento de hacer guerra al conde y a todos sus valedores, si es que ellos intentasen alguna novedad, y desde allí envió a decir al vizconde y a sus valedores ,que bien sabían él y todos sus vasallos y todo el mundo, que no había príncipe y señor que menos agravios hiciese a los suyos, que él hacía a sus vasallos, antes que por hacerles bien y disimularles tanto, les perdía, y que el vizconde era uno de ellos; pero esto no bastó, porque el conde de Urgel se puso a punto de guerra, para cobrar del rey sus castillos a fuerza de armas. Estuvo el rey en Lérida hasta el principio de este año 1260, y se partió a Aragón para dar razón a algunos negocios de aquel reino, que necesitaban de su real presencia; y el conde don Álvaro * con sus gentes, cobrando algunos lugares y castillos del condado de Urgel, y estragó la tierra y comarca de los q* estaban por el rey, el cual en esta ocasión mandó paga* don Álvaro mil quinientos morabatines alfonsíes, y cobró * él los pueblos de Somet (o Sornet), Roda, Fontes y Embit, que * Alfonso, abuelo del rey, había empeñado por dicha cantidad a los antecesores del conde, el cual libremente se *
volvió, y otorgó carta de pago del dinero; y después de * tomó por fuerza de armas las villas y castillos del est* de Ribagorza, que estaban por el rey, e hizo mucho daño * las aldeas y campañas de Balbastro (Barbastro). Convocaron todos * pueblos comarcanos, y particularmente aquellos que habían recibido daño de don Álvaro, en la dicha ciudad, y die* de ello queja al rey, el cual enojado de aquel atrevimiento mandó a Martín Pérez de Artesona, justicia de Aragón, que persiguiese con ejército formado a la gente de *don
Álvaro, porque estaba determinado de sacarle del *mundo si no se retiraba y apartaba de hacer los daños que hacía * poco después tuvo el rey cortes en Barcelona, y en ellas
se pudo dar remedio al estado de estas cosas, antes bien * vizconde de Cardona y sus parientes no querían conse* al donativo o servicio, que no quedasen él y los demás querellantes satisfechos de los agravios decían haber recibido del rey; pero sin darse a esto cumplida satisfacción, se o*gó el servicio, y quedaron las cosas de los barones *
de antes. Esto pasaba entre el rey y el conde don Álvaro y sus valedores, cuando el obispo de Huesca iba procediendo con gran cuidado en la causa del matrimonio; y a la *
estaba a lo mejor de ella, ora fuese que doña Cecilia *desconfiase por su poca justicia, ora porque no le pareciese la ciudad de Lérida segura, como ella decía, o que quisiese
dilatar el pleito, o por cualquiera otra causa, a 10 de las calendas de enero de 1261, por medio de su procurador, alegó delante del pontífice, que ella no tenía paso seguro para ir a la ciudad de Lérida, y que la dicha ciudad estaba muy cercana a las tierras de don Pedro de Moncada, y que él tenía allá muchos amigos y valedores, y que el obispo de Lérida don Guillen de Moncada era tío de doña Constanza, y que el rey don Jaime de Aragón, y don Sancho, arzobispo de Toledo, hijo del rey don Fernando, el Santo, estaban muy apasionados por doña Constanza y habían escrito al pontífice en su favor, y que el infante don Pedro, hijo del rey, había dicho, que él había de hacer que su prima doña Constanza fuese condesa de Urgel, y que era mal caso hubiese ella de acudir en una ciudad para ella tan sospechosa, de la cual era señor el rey don Jaime y lo había de ser don Pedro, su hijo, que tan declarado se mostraba en favor de ellas; y sobre esto pasaron algunas razones entre los procuradores de las partes, y a la postre * comprometieron, y por parte de doña Constanza nombraron a don Bernardo de Olivella, obispo de Tortosa, que después fue arzobispo de Tarragona, y por parte de doña Cecilia al de Carcasona, y al de Vique por tercero, en caso que los dos no concordaran; y el papa les cometió el negocio con un breve, despachado decimo calendas januarii pontificatus sui anno primo. Los obispos, recibido el breve, entendieron en el negocio y citaron las partes, asignándoles la ciudad de Manresa para oírlas; y porque el obispo de Carcasona no podía acudir, subdelegó a Bernardo, canónigo, y al arcipreste de la iglesia de Carcasona; pero estos, * no poderse juntar, o por sus ocupaciones, o por otra cualquier causa, pasó un año que no hicieron nada; y el obispo de Huesca procedía en la causa, y al 1.° de junio * 1262 declaró en ella, guardando siempre la disposición de los sagrados cánones, y con difinitiva sentencia adjudicó al conde por marido de doña Constanza, mandándole *
dejada la intrusa, la recibiese, como era obligado, y trat* con marital afecto, haciendo las amonestaciones y mandamientos eran menester, hasta descomulgarle a él y * entredicho en sus tierras y estados. Doña Cecilia y el conde apelaron cada uno de por si de esta sentencia a la sese apostólica; el conde pidió apóstoles, y estos le concedió * obispo de Huesca, a 14 de las calendas de agosto, * en ellos refiere muy largamente los motivos con que fu* la declaración había hecho y sumariamente las faltas * por parte del conde, el cual, después de haber apelado no se curó más de proseguir la causa, cohabitando con doña Cecilia, no obstante los mandamientos que él le había hecho. Doña Constanza, deseosa de cobrar su marido y que la sentencia se ejecutase, pidió al papa remedio *sobre esto; y él, con su bula despachada a 20 de febrero de 1263, lo sometió a don Arnaldo de Gurb, obispo de Barcelona, y al glorioso san Ramón de Penyafort, cuya santidad y buena fama era pública por todo el mundo, porque es* le obligasen a cobrar a doña Constanza y obedecer en to* a la sentencia del obispo de Huesca. Esto parece en *
misma bula, que vertió el padre Diago, del orden de Predicadores, en la vida que escribió de san Ramón de Penyafort: aquel autor la trae en romance, y aquí va en latín y dice *
episcopus servus servorum Dei venerabili fratri epis *Barchinone et reverendo filio fratri Raymundo de Penna-*Fortis Predicatorum capellano et penitentiario nostro sa* apostolicam benedictionem. Ad nostram noveritis au* pervenisse quod licet nobilis vir Alvarus comes urge* dudum cum dilecta in Christo filia nobili muliere * nepti charissimi in Christo filii nostri aragonensis *tris in ecclesie facie matrimonium per verba de pre*rit legitime contrahendum idem tamen comes eam *m traducere denegans minus juste nobilem mulierem * sororem dilecti filii nobilis viri comitis fuxensis (conde de Foix) de * de jure non posset super inducere presumsit uxo* m cum predicta Constantia coram venerabili fratre *urgelensi episcopo jus suum super hoc non posset pro * eo videlicet quod ad ipsum accessus haberi non pote* er districtum Alvari comitis memorati prefata nobili * benignitatem apostolicam implorante felicis recorda *Alexander papa predecessor noster dedit sub certa forma * fratri nostro oscensi episcopo per litteras apostolicas *tis ut si esset ita prefatum Alvarum comitem quod hu* super inducta dimissa eandem Constantiam traduceret *li affectione tractaret per excomunicationis in perso* terram ipsius comitis interdicti sententias apellatione *tione previa coerceret. Postmodum vero idem oscen* (Huesca, oscense) *episcopus cognitis hujusmodi cause meritis et juris ordine * difinitivam pro predicta Constantia sententiam profe*bi prefatum Alvarum comitem in virum adjudicans *us comiti mandavit eidem ut prefata super inducta di* den Constantiam ut tenetur traduceret et maritali af*ractaret: et licet idem comes super hoc ab eodem os*scopo (obispo de Huesca) ad sedem apostolicam duxerit apellandum appel* tamen suam cum potuerit elapsis septem mensibus et am* eurans prossequi ac super inductam ipsam damnabiliter predictam Constantiam ducere denegat pro sue inconsul* voluntatis. Porro sicut dolentes audivimus inter consa* ejusdem Constantie ex una parte ac memoratum comitem * olim propter hoc adeo graves inimicitie fuerunt exorte *tigante inimico humani generis nonnulla homicidia ac etiam incendia plurium locorum habitabilium exinde sunt * cuta. Nos itaque prout ex injuncte nobis servitutis officio * neri dignoscimur et animarum obviare periculis ac * inimicitiis finem imponere necnon periculo et guerrarum dis*mini que inter personas tam potentes et nobiles hujus* occasione invalescere possent viam percludere cupientes * cretioni vestre per apostolica scripta precipiendo mandam* quatenus predictum Alvarum comitem urgelensem monitis * ficacibus inducatis ut sue saluti consulens in hac parte sep* dictam Constantiam prefata super inducta prius omnino
dim*sa traducere ac maritali studeat affectione tractare: quod * forte ipse monitis vestris acquiescere in hac parte noluerit * vocatis qui fuerint evocandi de supradicta sententia per
supradictum oscensem episcopum promulgata legitime cognoscen* quod canonicum fuerit apellatione postposita statuatis facien* quod decreveritis per censuram ecclesiasticam firmiter observari non obstante aliqua indulgentia tibi Raymundo aut * ni tuo ab apostolica sede concessa quod te de causis intromitt* non tenearis invitus per ipsius sedis litteras non facientes * nam et expressam de indulto hujusmodi mentionem. Quod* non ambo his exequendis potueritis interesse alter vestrum * nihilominus exequatur. Data apud Urbem Veterem (Civitavecchia, Ciudad Vieja ?) X kalendas martii pontificatus nostri anno secundo.

A 9 de las calendas de octubre fueron intimadas estas bulas al conde en la ciudad de Balaguer, en ocasión que salía a caza en compañía de Geraldo de Cabrera, su hermano, y dos otros caballeros, con unas letras citatorias *emanadas de la corte del obispo de Barcelona a 16 de las calendas de octubre, y en ellas estaban pendientes los sellos del obispo de Barcelona y de san Ramón, el cual, dice el proceso que era imago predicatoris stantis manibus junctis et flexis genibus et desuper erat manus hominis benedicentis, y en derredor del sello estaban escritas estas palabras: Signum fratris Raimundi domini Papae poenitentiarii. Doña Cecilia, pocos días después de la data de esta bula, *alcanzó otra del mismo papa Urbano, que cometía esta causa a los obispos de Oloron y Comenge, despachada en Ci*avechia (Civitavechia, Civitaveccia, Ciudad Vieja, Urbem Veterem), a 4 a de las nonas de mayo, de su pontificado *año segundo, que era el de Cristo Señor nuestro 1263, *nde a su modo dio razón al pontífice de todo lo que había pasado. Esta bula he visto en el Archivo Real, en el armario 16, en el saco de los papeles de este casamiento, y en un proceso que está en el mismo saco, y es la que se sigue.
Urbanus episcopus sorvus servorum Dei venerabilibus fra* Oloronensi et Convenarum (Comenges) episcopsis salutem et apostoli* benedictionem. Dilecta in Christo filia nobilis mulier *Cecilia comitissa Urgelli uxor nobilis viri comitis urgellensis no* significare curavit quod nobilis mulier Constantia nata nobilis viri Petri de Montecateno (Moncada, Montcada) Illerdensis diocesis falso asse* quod ipsa cum eodem comite matrimonium per verba con*
de presenti quodque dictus comes eam non curans tra* eandem Ceciliam de facto super duxerat in uxorem et * felicis recordationis Alexandro pape predecessori nostro quod ipsa ad venerabilem fratrem nostrum Urgellensem episcopum ipsius comitis diocesanum accedere non poterat *nisi per terram comitis memorati super hoc ad venerabilem *fratrem nostrum Oscenem episcopum contra eundem comitem *ipsius predecessoris sub certa forma litteras impetravit quarum auctoritate cum eadem Constantia nominatum comitem coram prefato episcopo citare fecisset predicta Cecilia rem suam agi * ciens et ex hoc inveniens sibi prejudicium generari ab *eodem Oscensi episcopo ad docendum de jure suo se postulavit *admitti: et licet dictus episcopus Oscensis ad hoc eam duxerit * quia tamen dictus episcopus ad hoc ei locum non * assignans alium sibi contra justitiam denegabat assig* *securum humiliter requisitus predicta Cecilia sentiens ex hoc indebite se gravari ad sedem duxit apostolicam apella*dum et super apellatione sua ad fratrem nostrum Carcassonensem episcopum ejusque collegas ipsius sedis litter* impetravit: et licet iidem judices in hujusmodi appellatione causa infra annum procedere non curaverint quamvis ab *eodem Cecilia fuerint super hoc pluries legitimis temporibus *quisiti predictus tamen Oscensis episcopus in principali * de facio procedens eundem comitem predicte Constantie * iniquam difinitivam sententiam adjudicavit in virum a *prefata Cecilia ad eandem sedem vocem appellationis emis* Quocirca fraternitati vestre per apostolica scripta manda* quatenus vocatis qui fuerint evocandi et auditis hinc inde *positis quod canonicum fuerit appellatione postposita decer* tis facientes quod decreveritis per censuram ecclesiastic* firmiter observari non obstante constitutione de duobus di*
edita in concilio generali dummodo infra ipsas predicta Cecilia super his assequi nequeat justitie complementum et u* tertiam vel quartam aliquis extra suam diocesim auctoritate *
sentium ad judicium non trahatur (o trabatur) proviso ne in terris dictor* nobilium excomunicationis vel interdicti sententiam profer* nisi super hoc a nobis mandatum receperitis speciale: quod* non ambo his exequendis potueritis interesse alter vestrum
*nihilominus exequatur. Data apud Urdem (Urbem) Veterem IV *nonas maii Pontificatus nostri anno secundo.

Los obispos de Oloron y Comenge, a quienes vino dirigida esta bula, subdelegaron al abad de Monte Oliveveto * la diócesis de Carcasona, y a Izarno, pavorde Talabuxens*
a Bernardo, arcediano de la dicha iglesia de Carcasona, para que recibiesen las informaciones; y ellos se reserv* el hacer la sentencia, difinitiva, aunque después también
dieron comisión para promulgarla. Citaron al conde * doña Constanza, la cual jamás contestó la lite, y prosiguieron su pleito hasta sentencia difinitiva; y en el discurso *
él, ya se excusaba de la causa el uno de los subdelegados, ya el otro, y el conde, que en aquella ocasión debía tener pocas ganas de volver a estar con doña Cecilia, alegó que él
no tenía obligación delante de los dichos obispos, por estar remotos más de dos dietas, pero a la postre, instados de doña Cecilia, señalaron lugar para la decisión de la causa y
publicación de la sentencia en la ciudad de Carcasona, en la iglesia de Santa María de Burgo Nuevo. Mientras estas apelaciones duraban y los obispos de Francia y subdelegados por ellos hacían lo que queda dicho, el conde, ora fuese por temor de las censuras con que le obligaba el obispo de Lérida o remordido de su conciencia, o por temor del rey, o por otra cualquier causa, obedeció, y a 16 de setiembre del año 1263 dejó del todo a doña Cecilia y cobró a doña Constanza, siendo él de edad de veinte y cuatro años, y vivieron juntos cerca de un año, con mucha paz y amor, y engendró a doña Leonor, que casó con don Sancho de Antillon, y tuvo de ella una hija, llamada Constanza, que casó con don Gombau de Entença, y de este matrimonio salió doña Teresa, que casó con el infante don Alfonso, que fue conde de Urgel y después rey de Aragón, y le llevó en dote el condado de Urgel, vizcondado de Ager y baronía de Entença, porque ella lo vino a heredar todo. El glorioso san Ramón, que fue el juez delegado con el obispo de Barcelona
por el romano pontífice, contento de este tan buen *suceso de que el conde hubiese dejado a doña Cecilia y *cobrado a doña Constanza, se excusó de esta causa, porque
estaba enfermo y pasaba de edad de ochenta años: esto fue * 3 de las nonas de febrero de 1264, y quedó solo juez de * causa el obispo de Barcelona.
Doña Cecilia quedó muy agraviada de lo que el conde había hecho e instó con grandes veras la causa de apelación; cometida a los obispos de Francia, y por ellos, a *26 de
febrero de 1264, Bernardo, arcediano de Carcasona, e Izarno de Fano-Jovis, paborde de Talabux, jueces subdelegados, dieron su sentencia, y declararon haber doña Cecilia bien
apelado, y el obispo de Huesca mal declarado y proseguido su causa; y pocos días después instó el procurador de doña Cecilia a los dichos jueces para que conocieran *
aquel matrimonio era legítímo o no, y ellos dieron sob* ello su sentencia, declarando que el matrimonio de doña Cecilia era bueno, y que el conde estaba obligado a dejar a doña Constanza y volver con doña Cecilia, y condenaron a doña Constanza en costas, y que pagase por ellas no * cientos marcos de plata; y a 29 de marzo, el con* que estaba ya olvidado de doña Cecilia y arrepentido * lo mal hecho, apeló al pontífice de esta sentencia, y * otras razones que da, es no haber sido citado ni haber *contestado la lite. Estas sentencias fueron la perdición y confusión de este negocio, y causaron los grandísimos *males que después se siguieron: con todo el conde persev* con doña Constanza, hasta 23 de setiembre de este año * y en dicho tiempo procedieron los dichos obispos o *sus
subdelegados con censuras contra el conde, obligándole * que obedeciese, y presentaron sus letras al abad de *San Saturnino de Tavernoles y al prior de Organyá, para que
ejecutaran su sentencia; y un martes, pasada la fiesta de Pascua de Resurrección, mandaron a todos los obispos, abades, rectores, priores y otros a quienes fuesen presentadas sus letras y mandamientos, que obligasen con censuras, hasta tañer campanas y matar candelas, al dicho conde y a doña Constanza, a obedecer a la dicha sentencia, y según es* determinados, si pudieran, también metieran entredi* las tierras del conde; pero el papa, como vimos en * bula, se lo había expresamente prohibido. Estos manda* se publicaron en nueve lugares o parroquias del *obispado y condado de Urgel. Al principio el conde no hacía * de estas censuras, pero después fue muy obediente a *
mandamientos, que no debiera, y dejando a doña Constanza, que había ya un año y siete días que estaba con * volvió a tomar a doña Cecilia, lo que pareció a todos muy mal y causó general escándalo en todos estos reinos, * parientes de doña Constanza se alteraron mucho de *. El obispo de Barcelona, por remediar tantos daños co* habían sucedido, y obviar muchos más que se esperaban, con toda la diligencia posible mandó meter a punto de * declarar el proceso que se ventilaba delante de él, * dar fin a aquel pleito y sacar de escrúpulo, si es que le * al conde y a su conciencia; y para más facilitar la recepción de los testigos que se habían de dar por las * señalaron la villa de Cervera, por lugar más cómodo * dicha recepción, y la cometieron a Arnaldo de Vernet, dean de Lérida, y a Ricardo arcediano de Urgel. El deán de Lérida acudió a Cervera, y a 14 de julio de este año *1264, estaba ya aparejado para recibir dichos testigos. El *arcediano, ora fuese para dilatar el negocio, y en eso dar * al conde y a doña Cecilia, rehusó acudir, dando por * que no se tenía por seguro, porque toda aquella * estaba llena de gente de guerra, unos por cuenta * don Pedro de Moncada, y otros del conde de Urgel. Doña Cecilia estaba en Pons e instaba que el arcediano y los testigos que ella había de dar fuesen guiados porque de otra manera nadie osaba ponerse en camino.
El obispo de Barcelona y el deán de Lérida lo acomodaron todo, y quedaron guiados el arcediano y testigos, y les dieron hombre que les acompañase, y prometieron don Pedro de Moncada y el conde de Urgel que no les harían, ni ellos ni su gente, daño alguno; pero los testigos de doña Cecilia tardaron algunos días, y a la postre dijeron que no querían ir sino compelidos con censuras, y pidió doña Cecilia * fuesen recibidos otros que ella tenía en el condado de Foix y reino de Francia: hiciéronse letras de comisión para los obispos de aquellas tierras, y fueron recibidos, y doña Cecilia quedó satisfecha. Todo esto pasó en los meses de julio y agosto, y cada una de las partes, como mejor pudo, justificó su causa.
En esta ocasión, el conde de Urgel no dormía, * hacía todo lo que podía para quitar la causa de manos * obispo, y meterla en manos de los prelados de *Francia por ver que ellos sentían diferentemente de los de Cataluña de aquel pleito (porque no estarían tan bien informados en él; y así representó al papa Clemente, que él *sentía muy agraviado de lo que le habían hecho el obispo de Barcelona y san Ramón, y de lo que el obispo hacía, * no esperaba de ellos justicia, y así suplicaba que le di* otro juez que conociera de estos perjuicios que decía se le hacían, y sobre de ello informó largamente al papa, si bien no le dio entera noticia de lo que pasaba. El papa, qui* idus julii, pontificatus anno primo, que era de Cristo 126*, despachó sus bulas al obispo de Beziers, cometiéndole *ete negocio; y él intimó al obispo de Barcelona y a san R* dichas bulas, porque no pasaran adelante en su co* Doña Constanza envió allá su procurador, que le dio *
satisfacción y respuesta, y se apeló al pontífice; y * el obispo de Beziers, enterado de la verdad y cali* negocio no se curó más de él, porque conoció que *sistía en dilaciones y subterfugios que buscaba don *; y por mayor claridad del negocio, el obispo de *na firmiter declaró que, no embargante la comisión * de Beziers, de la cual se había ya apelado, podía *eder en la causa. Esto pasó a 30 de octubre, y *guiente, en iglesia de Santa Catalina, mártir, de *ma, el obispo de aquella ciudad, estando presentes *mon y fray B. Dezbach, declaró, que por haber de ir * rey a la conquista de Murcia, tomando la cruz con* sarracenos, subdelegaba al prior de Santa Eulalia *mpo, del orden de los canónigos reglares de San *, encargándole que, en lo que pudiese tomar * con san Ramón, lo tome; y este el día siguiente, *dó citar al conde, a quien nadie osaba presentar *nes, y el que le citó dejó las letras sobre el altar * de la iglesia mayor de Balaguer, que dice se llamaba *
María de Almatano, y en presencia de Ricardo, *arcediano de Urgel y rector de la ciudad de Balaguer. Hecho * prosiguió su causa, y el proceso quedó concluido y de* muchas dudas y dificultades que por parte del con* oña Cecilia se movieron, que más eran para dilatar *, que por otro buen fin, y a 12 de noviembre de * año, estando el dicho prior de Santa Eulalia en el *ro de la Seo de Barcelona, y tomado consejo de san *n, según el obispo se lo había encargado y negocio tan grave requería, dio sentencia en favor de doña Constanza, confirmando la que había hecho el obispo de Huesca. *
No se puede explicar con palabras que tal quedó el co* y todos sus amigos y valedores, y las alteraciones que *bieron en su ánimo con tal declaración, la cual aprovechó poco, porque el conde declaró que no quería obedecer a esta sentencia, sino estar a lo que declararon los juecen de Francia, de cuya declaración nacieron daños irremediables; y el glorioso san Ramón, condolido de ellos y lastimado del poco caso que hacía el conde de la última sentencia, y pareciéndole que este negocio, por razón de las sentencias encontradas que había no podía tener aquí buen fin, escribió una carta al papa Clemente, dándole razón de todo lo que había pasado, aconsejándole que se asuma a si este negocio, y vistas las pretensiones de las partes, sea el juez y conocedor de este negocio. Copia de esta carta he visto en el archivo real de Barcelona, aunque ya algo consumida del tiempo, y la tradujo en castellano el padre Diago, en la vida del santo, y yo, por ser de un santo tan grande y paisano nuestro, y para defenderla de las injurias del tiempo, de quien, por su antigüedad, queda algo maltratada, la traigo aquí, y dice de esta manera:

Sanctissimo et in Christo patri reverendissimo domino Clementi divina providentia sacrosancte Romane Ecclesie summo pontifici frater Raimundus de Pennaforti terram coram *Beatissimis pedibus osculari. Reverende Paternitati vestre duxi humiliter in Domino intimandum quod bone memorie dominus Urbanus predecessor vester causam matrimonialem que vertebatur inter comitem Urgellensem ex una parte et filiam nobilis Petri de Montecateno ex altera venerabili patri episcopo barchino* terminandam sub certa *foram comissit: et quo*er infirmitates meas multiplices et nimiam debi* prosecutione cause non poteram personaliter * hujusmodi rationabili ac sufficienti ac nota *entia partium assignata renuntiavi simpliciter *us episcopus procederet sine me prout secun* escripti de jure poterat et debebat: qui cum ali*e processisset occasione facti frontarie contra sar* impeditus causam ipsam subdelegavit priori * de Campo ordinis sancti Augustini in suburbio * prior de concilio sapientium et virorum Deum *sam ipsam sententialiter terminavit quantum in* et humana fragilitas nosce sinit rationabiliter et * canonicas sanctiones. Hinc est quod ego ad excu*entiam meam super hoc quod propter causam * necessariam superius assignatam renuntiavit pro * predicte et ut aliqua de periculis imminentibus * presentes litteras per dilectum in Christo G. de *rem presentium mittere destinavi. Supplico igitur * Pater coram vestris sanctis pedibus provolutus *ras strages hominum scandala gravia et pericula * jam ex hoc sunt secuta sicut ad vestram credi* pervenisse et alia que imminent in posterum gra*riter subveniatur misericorditer intendas diligen* rocessibus et circunstantiis attenter habitis et * omnia fideliter per ipsum presentium portito* presentiam transmittuntur finem optatum pari* am predicto negocio imponatis: nam sicut mihi * pars hoc desiderat et expectat et insuper fama *redicat et credo firmiter verum esse quod nunquam * apostolicam sepe fata causa potui terminari * hujusmodi determinatio quod Deus avertat per * vestram non fiat vel etiam diferatur in longum *liter quod cum ex utraque parte sint multum no* es tantum agravabitur indignatio et pericula tam *entur quod vix temporibus nostris poterit nego* pacem. Dominus Jesus Christus dirigat vos et * vestros tam in iis quam in aliis in beneplacito suo semper ita quod per vestram piam et sanctam sollicitudinem fides sancta catholica exaltetur et pax Dei que exsuperat omne censum undique procuretur. Data Barchinone quarfa feria *
Paschas.
Esta carta fue de tanta eficacia, que ella sola fue bastante para que el papa se hiciese juez de este negocio, el cual, a 15 de mayo, año segundo de su pontificado, y de Cristo nuestro Señor 1266, lo cometió al obispo y cardenal Prenestino, encargándole con grandes veras mirase en ello; y éste, citadas y oídas las partes, procedió en la causa, y a la que pidieron al procurador del conde, que era G. de Montalbá, el que llevó la carta de san Ramón, que enseñase su poder, lo rehusó, diciendo que primero quería ver la comisión que el papa le había hecho de esta causa y negocio, lo que fue muy notado; y esto y otras dificultades semejantes, como era impugnar la procura de doña Constanza,
porque era otorgada sin licencia o consentimiento de su padre, cada día desacreditaban la causa de doña Cecilia, y del conde. Aquí se representaron los motivos con que las
partes fundaban su intención, y se repitió otra vez todo lo que hasta aquel punto se había alegado por cada una de las partes; articuláronse muchas cosas particulares y muy menudas que habían pasado entre el conde y doña Constanza, y todo lo que alegaron se dio probado con testigos que se ministraron en gran número: por parte del conde se dieron más de treinta, y muchos más por parte de la condesa; y aunque estos probaban mejor y daban muy acertadas razones de sus dichos, pero los del conde se mostraron más apasionados y sobornados, y los más de ellos o *casi todos eran vasallos y hombres suyos; y confesaron los *más de ellos que todo lo que tenían lo tenían por el *conde,
que le eran amigos y estaban muy deseosos que saliese * negocio a gusto suyo. Estos dijeron, que cuando el conde y doña Constanza fueron desposados, eran los dos de tan poca edad; que del todo eran inhábiles para el uso del matrimonio, y mucho más para dar el consentimiento que * necesario, y que estando en casa de su suegro, lloraba * verse casado, y que cuando lo desposaron estaba tan *vergonzoso y pasmado, que no estaba en lo que hacía, y * la edad poca de los dos impidió que aquel matrimonio * consumado, porque a doña Constanza no se le apa* diez años, ni al conde doce, y era tan inhábil para el uso del matrimonio, que aun dos años después de él no * para ello. Pedro Cortit, de Balaguer, en su deposición, *ando de esto, cuenta ciertos tratos que tuvo (dos años después de casado con doña Constanza) con una criada de *Bernardo de Anglesola, con que destruye más la pretensión *el conde, que no la fortifica; y Jaime de Cenvera dice,
* una vez, estando en la TorrebIanca, junto a Linyola, * dijo, que no quería casar con la hija de don Pedro de Moncada. Esto se decía por su parte. Por parte de doña Constanza se justificó, que cuando los * fueron casados eran de tal edad y aspecto, que cualquier persona que los hubiera visto los juzgara por hábiles al matrimonio, y que habían visto muchos, que no eran de tan buena disposición como ellos, que le habían consumado, y que los dos eran de tan buena estatura del cuerpo, que nadie que los hubiera visto podía juzgar otra cosa, y que el conde, ya antes de casar, en la villa de Tamarit y Linyola había tenido conversación con mujeres cort* y se había encerrado solo con ellas, y que cada * después de esposado, se acostaban él y doña Constanza * una misma cama, y allá quedaban solos; y ella, el *otro después de la primera noche, comunicó a una dueña
llamada María Serrano todo lo que había pasado, y * deposición, que está en el dicho armario, lo refiere muy largamente y por menudo; que seis meses después de ca* salió a caballo, armado de todas armas, en unas *cias que tuvo con Guillen de Anglesola y Ramón de Cardona, así como pudiera salir cualquier hombre de * edad. Estas y otras muchas cosas, dichas por testigos * calificados y mayores de toda excepción, probó por *
te doña Constanza; y declaradas las dudas y dificultades * se ofrecieron, que en causas matrimoniales suelen ser *chas, quedó el proceso concluido; y el cardenal, * en Viterbo, a 4 de abril, año 1267, indiccion décima * declaró en la causa (está la sentencia en el archivo real de Barcelona, armario 16, n.° 4), sentenciando en favor de doña Constanza; y luego el pontífice, que estaba * en dicha ciudad de Viterbo, a 11 de dicho mes de abril y de su pontificado año tercero, despachó un rescr* obispo de Barcelona y al de Magalona, en Francia, * el de Mompeller, haciendo en él mención larga de la declaración del cardenal obispo Prenestino, mandándoles hicieran ejecutar, hasta descomulgar al conde y *meter en entredicho sus tierras, en caso que no quisiera obedecer*.
Estaba enfadado el conde de tanta persecución y *cha como tenía, espiritual y temporal; cada día se le *maban mandatos penales en razón de su matrimonio, y * armas del rey le inquietaban lo poco que le había * del condado de Urgel, cuando se retiró a Foix doña Cecilia; y estando allí, la tristeza le consumió, *dados y pesadumbres le volvieron tísico, y con ca* que sobrevinieron dentro de pocos días, murió, no *uelto de las censuras en que había incurrido, por * obedecido a las sentencias y mandatos apostólicos.
Según la más común opinión, al principio del mes * del año 1268, según Zurita; y según el anal de * memorias de aquel ilustre convento, del año 1267; * puede ser, contando o entendiendo los unos de la *cion, y los otros de la Navidad. El autor del libro Flos mundi dice que murió la vigilia de san Ber* Foix; pero no especifica el año: murió de edad *e y ocho años, pocos meses más o menos, y este año murió don Pedro de Moncada.
* don Álvaro muchos dones y gracias de naturaleza: * liberal y generoso, diligente, gran soldado y muy * de sus vasallos y amigos; y si sus virtudes no las *ara con el desordenado amor que tuvo a doña Cecilia * tuviera mejores consejeros, hubiera sido uno de * esclarecidos príncipes de estos tiempos. El autor * de Ripoll, no pudiendo disimular lo bueno que * él dice: fuit armis strenuus, probus, largus, dili* urimum generosus, qui propter discordiam et dimis* primae uxoris, habuit multas guerras, et pthysi ac * est
mortuus apud Fuxum, anno Domini MCCLXVIl, *it magna discordia et tribulatione comitatum, etc. * sepultado en Foix, y dejó de doña Constanza una hija * Leonor, de quien hablamos arriba, y de doña Cecilia dos hijos: el mayor se llamó Armengol y le sucedióen el condado y el otro Álvaro, que fue vizconde de Ager. Este casó con Sibila, hija de Ramón, vizconde de Cardona, y de Sibila, su mujer, y hermana de Ramón Folc, vizconde de Cardona: consta en auto de la dotalia del beneficio de San Anton en la Seo de Barcelona, que fundó Brunisenda, su hermana, mujer de don Guerau de Cervelló, en las nonas de enero de 1319. No he visto hasta ahora su testamento; pero sé que dejó a la fábrica del monasterio de Predicadores de la ciudad de Lérida cien morabatines, los cuales pagó el rey don Jaime a 4 de mayo de 1275, con otros ciento que le dejó la reina doña Violante, su mujer.
En vida de este conde se trató entre san Luis, rey de Francia, y don Jaime, rey de Aragón, de concordar las diferencias antiguas que había entre los reyes, sus antecesores, sobre los derechos que unos tenían en algunas tierras de los reinos de los otros. Por facilitar el trato de esto, envió el rey don Jaime a don Arnaldo de Gurb, obispo de Barcelona, a Guillen, prior de Cornellá, y a Guillen de *Rocafull, gobernador de Monpeller por el rey; y en marzo de 1275 les dio poder para renunciar en favor de san Luis y de sus sucesores, y aceptar la renunciación de él; y después, (atrás pone 1275, delante 1258) a 5 de los idus de marzo del año 1258, en un lugar del reino de Francia, llamado Corbolio, (tratado de Corbeil) renunció en presencia de Felipe, hijo primogénito del santo, y de otros muchos *
el derecho que pretendía competerle por razón de los señoríos o feudos antiguos o por cualquier razón en los condados de Barcelona, Urgel, Besalú, Rosellon, Ampurdan,
Cerdaña, Conflent, Gerona y Vich, y de esto se hizo el di* día auto público, sellado con el sello de este glorioso *, en cera verde y pendiente de un cordón de seda co* sin torcer, y en él la imagen del santo sentado, con * a la cabeza y vestiduras reales; a la una mano tiene * flor de lis, y a la otra un cetro real, con algunas flores * lis por remate, así como le pinta Tillet en su historia, y * derredor unas letras que dicen: Ludovicus Dei gratia * Francorum Rex, y al dorso una sola flor de lis, casi del * que la pinta Tillet, y sin aquellas dos florecitas que sa* de las hojas de la flor. Guárdase esta escritura, o, por * decir, reliquia en el archivo real de Barcelona, en el armario 7, saco 1, n°. 62; y después, a 17 de las calendas de *sto del mismo año, el rey don Jaime renunció el dere* le competía en algunas tierras del reino de Francia, * largamente quedan especificadas en el auto de la dicha * renunciación, el cual dejo de continuar aquí, pues le podrá * el curioso en la historia o memorias del Languedoc, * estos años atrás con mucha erudición y diligencia sacó * Mr. Guillen Catel, del consejo del rey Luis XIII, * la página 29: y después de estas renunciaciones, se fue *vidando el contar, tan usado en Cataluña, por los años de los reyes de Francia, tomando de aquí adelante, unos el de la encarnación, y otros el de la Navidad de nuestro Señor Jesucristo, como lo usamos ahora, y se fue continuando muchos * después; y en su lugar veremos cómo lo mandó con *constitución el rey don Pedro III (IV de Aragon).

FIN DEL TOMO NOVENO DE LA COLECCIÓN, PRIMERO DE LA HLSTORLA
DE LOS CONDES DE URGEL.

ERRATA NOTABLE.

En la página 186, línea última, donde dice: 10 años, léase: 50 años.


miércoles, 5 de junio de 2019

Tomo I, texto IX, lit vellut + fallecimiento de doña María de Aragón

IX. 30 de diciembre.

Carta del rey al camarero de la reina, pidiéndole la cama de terciopelo, y la tunicella con que se había consagrado reina su mujer, para en el caso de que le subsiguiese la muerte.
/ ya ha muerto, 29 de diciembre de 1406 según la wikipedia, hay que tener en cuenta la numeración de los años como indica Próspero de Bofarull en la introducción
A continuación va el documento que manifiesta el fallecimiento de dicha reina doña María de Aragón.



Martín el Humano, rey, Aragón
Martín el humano (Retrato de Martín I en el retablo de San Severo.)



IX.

Legajo de cartas reales, n.° 107. 30 de diciembre de 1407.

Al feel nostre en Marçal de la cambra de nostra muller la reina. - Lo Rey. - En Marçal. Per lo cas inopinat que ses subseguit de la mort de nostra muller la reina qui Deus haja es asi necesaria la tunicella ab que la dita Reina se consagra et lo lit seu de vellut tanat: perque volem eus manam que de continent vista la present nos trametats la tunicella et lit dessus dits: e si es cas que eren
en poder dels consellers daqui de Barchinona hajatslos de continent a vostra ma et enviatsnoslos de continent com los hajam necessaris pera la sepultura de la dita reina. Perque non haja falla en res quens ho trametats de continent. Dada en Valense sots nostre segell secret a XXX dies de decembre del any mil CCCCVII. - Sperendeo (l). /Sperans-in-Deo/

(1) No hallándose en este archivo el testamento de doña María, se inserta el siguiente documento, que acredita su otorgacion e indica algunas de sus disposiciones.

Reg. 2311, fol. 137. 3 de agosto de 1407.

Pateat universis: quod nos Martinus Dei gratia Rex Aragonum Valentie Majorice Sardinie et Corsice comesque Barchinone Rossilionis et Ceritanie nostro propio nomine et ut executor testamenti seu ultime voluntate illustris Marie regine Aragonum conjugis nostre clare memorie et ut princeps et dominus necnon ut pater et conjuncta persona illustris Martini regis Sicilie carissimi primogeniti nostri heredisque universalis conjugis nostre predicte et etiam ut detentor bonorum omnium que ipsa regina cum ageret in humanis possidebat et nos jure viduitatis et fori beneficio possidemus: et nos frater Bartholomeus Borras frater Franciscus Eximenez frater Johanes Eximenez magistri in sacra Theologia ordinis minorum et Gilabertus de Scintillis alias Raymundus de Rivosico miles consiliarius et camerlengus dicti domini regis manumissores et executores testamenti domine regine predicte una cum dicto domino rege ut constat de dicta manumissoria per testamentum per dictam illustrem reginam firmatum in posse Anthonii Valls scriptoris sui et auctoritate regia notarii publici in loco de Villaregali regni Valentie die XXVIIIa decembris anni presentis et infrascripti prospicientes grandia onera dicte manumissorie que diversis creditoribus et servitoribus dicte illustris regine et aliis personis tenetur et obligata existit et quod pro traslatione corporis dicte illustris regine fienda ad monasterium Populeti erat nobis summe necessarium habere diversas peccuniarum quantitates ad premissa satisfaciendum que faciliori via et magis prompta et absque dispendio facultatum dicti heredis et manumissorie pretense haberi non poterant quam per viam arrendationis reddituum emolumentorum locorum et villarum comitatus de Luna et nonnullorum aliorum locorum infra regnum Aragonum sitorum quam fecimus Francisco Berengarii mercatori ville Muriveteris ad certum tempus et sub certis conditionibus et ad pretium inter nos conventum ut constat de dicto arrendamento per publicum instrumentum datum et actum Valentie ac clausum per fidelem secretarium nostrum Bernardum Medici auctoritate regia notarium publicum die presenti et infrascripta in cujus instrumenti arrendationis confectione et longe ante fuit habitum et in pactum deductum inter nos et dictum Franciscum Berengarii quod constitueremus procuratores legittimos habentes potestatem ad infrascripta suficientem pro
corroboratione contractus arrendationis predicte: ideo facimus constituimus et ordinamus certos speciales et generales procuratores nostros et cujuslibet nostrum prefatis nominibus videlicet vos Enecum Eximenez de Galloz et Dominicum Cosida habitatores civitatis Cesarauguste et utrumque vestrum in solidum absentes ut presentes ita quod occupantis conditio potior non existat sed quod per unum vestrum inceptum fuerit per alium mediari valeat et finiri ad confitendum et concedendum in judicio et extra pro nobis et nostro nomine et cujuslibet nostrum nominibus jam dictis coram regente officium gubernationis dicti regni vel justitia Aragonum ipsius locumtenente seu alterius eorum dictum arrendationis instrumentum per nos dicto Francisco Berengarii firmatum et omnia et singula in capitulis et in eo contenta et ad audiendum laudandum acceptandum pro nobis et cujuslibet nostrum dictis nominibus sententiam condemnatoriam per dictos regentem officium gubernationis justitiam Aragonum ipsius locumtenentem vel alterum eorum sub obligationibus renunciationibus securitatibus firmitatibus modis et conditionibus tam in dicto instrumento arrendationis quam in libello ac petitione ipsius pretextu seu vigore contra nos et quemlibet nostrum per dictum Franciscum Berengarii arrendatorem seu ipsius legittimum procuratorem offerendo contentis et expressatis: dantes et concedentes vobis dictis procuratoribus nostris et vestrum utrique in solidum plenum posse et facultatem agendi respondendi deffendendi excipiendi conveniendi replicandi triplicandi litem vel lites contestandi renunciandi et concludendi requirendi et protestandi fidancias jure et de servando indempnem et de tenendo de manifesto et quascumque alias necessarias et opportunas offerendi sententiam et sententias tam interlocutorias quam difinitivas audiendi laudandi et acceptandi et demum omnia et singula alia generaliter faciendi et libere exercendi agendi et procurandi que merita earum postulant et requirunt esto quod fuerint graviora aut majora et que requirerent speciale mandatum sine quibus predicta expediri comode non valerent. Promittentes nominibus predictis habere ratum gratum et firmum perpetuo quicquid per vos dictos procuratores aut vestrum utrumque in predictis et circa predicta cum dependentibus et emergentibus ex eisdem fuerit dictum confessatum acceptum factum gestum seu procuratum ac si per nos metipsos et quemlibet nostrum confessatum fuisset concessum laudatum factum dictum et procuratum et nullo tempore revocare contrafacere aut venire. Promittentes inquam nos dicti constituentes et quilibet nostrum dictis nominibus in posse notarii infrascripti ut publice persone a nobis paciscentis stipulantis et recipientis pro dicto Francisco Berengarii interesse suo et pro illis quorum interest aut interesse poterit in futurum dictos procuratores seu aliquem ipsorum per nos in vim dicti pacti constitutos non revocare nec revocari facere et minus inhibere directe nec indirecte donec dictus contractus arrendationis et omnia et singula in eo contenta sententiatus fuerit que sententia in rem transiverit judicatam et fecerit jus inter partes. Et si contigeret contrarium fieri per nos seu aliquem nostrum quod non credimus volumus quod talis revocatio ac inhibitio nullius valoris existant immo habeantur pro nova constitutione. Et ut premissa majori robore fultiantur volentes vos dictos procuratores nostros aut vestrum alterum relevare ab omni onere satisdandi promittimus dictis nominibus judicio sisti et judicatum solvi cum suis clausulis universis sub obligatione omnium bonorum manumissorie jamdicte. Quod est datum et actum in civitate Valentie IIIa die augusti anno a nativitate Domini MCCCCVII regnique nostri duodécimo. - Signum + Martini etc. qui hec dictis nominibus laudamus concedimus et firmamus sigillumque nostrum appendicium hic jussimus apponendum. - REX MARTINUS.


María de Luna, reina de Aragón:

WIKI:
María era aragonesa de nacimiento, su familia pertenecía a la Casa de Luna de la alta aristocracia aragonesa. Probablemente nació en Pedrola (Zaragoza), donde su padre tenía su residencia, aunque poseía señoríos por todo el reino. Sus padres fueron don Lope de Luna, primer conde de Luna, y Brianda d'Agout. Fue comprometida en matrimonio con el infante Martín, hijo de Pedro IV el Ceremonioso, cuando todavía no llegaba a los ocho años. En cuanto cumpliese los ocho años debería ser entregada a la reina Leonor, para que fuera educada en la corte.

Su casamiento fue el domingo 13 de junio de 1372, en la catedral de Santa Eulalia de Barcelona. De este matrimonio nacieron cuatro hijos Martín, el primogénito, Jaime, Juan y Margarita; los tres últimos murieron niños.
Martín, rey de Sicilia, muere a la edad de 33 años. / En esta misma página aparece ... 
Martini regis Sicilie carissimi primogeniti nostri heredisque universalis...

Fue reina de Aragón, condesa de Luna, duquesa de Montblanc, señora de Bolea, Berbegal, Loarre, Vall de Uxo, Segorbe y otros lugares.

En 1396 ascienden al trono al morir Juan I El Cazador. Martín se encontraba en Sicilia, por lo que la nueva reina tuvo que actuar como Lugarteniente General ante las pretensiones al trono del conde de Foix y de la reina viuda Violante de Bar. En 1397, Martín I volvió de Sicilia e inmediatamente juró fueros siendo coronado en la Catedral de San Salvador de Zaragoza, realizándose los festejos en la Aljafería.

Fue una mujer noble, pues descendía de la casa de los Luna, caritativa y amante de la justicia, de profundas convicciones religiosas, sin llegar a la superstición, y aficionada a la música y a la lectura.

Mujer elegante y austera, la pompa y frivolidad de la Corte no influyeron en esta mujer, que superaba a su marido en la capacidad de gobierno. Mujer cercana al pueblo, protegió siempre a los más desfavorecidos, ayudándoles económicamente, incluso les eximió de impuestos; defendió a los payeses de remensa, a las aljamas de moros y judíos de Calatayud y Daroca; intentó poner paz entre los clanes familiares que estaban asolando el reino, incluidos los de su propia familia; escribió varias cartas al Papa, Benedicto XIII, para abolir los malos usos que consideraba contrarios al derecho humano y divino.

Francesc Eiximenis le dedicó una obra suya: Scala Dei, que es un pequeño tratado sobre moral y teología, escrito en occitano (al que llaman catalán) quizás en 1399, con motivo de su coronación como reina (23 de abril), que pertenece al género de los devocionarios, muy comunes entre las clases altas en la Edad Media.

La reina María tuvo una precaria salud. Murió de un ataque de apoplejía en 1406 en Villarreal camino de sus tierras de Segorbe, cuando iba a reunirse con su esposo que se encontraba en Valencia. /En esta misma página sale Villaregali/


En su testamento, redactado en 1404, donaba a los frailes franciscanos el monasterio de Sancti Spiritu que ella había promovido para ellos (a 10 km de Sagunto y 35 de Valencia), así como una renta de 5000 sueldos valencianos que se cobrarían de las rentas de Almonacid, aumentada más tarde en 1500 sueldos que debían destinarse para vestuario y manutención y 500 sueldos más a cobrar de las rentas de Paterna para reparaciones en el edificio.


María de Luna, reina de Aragón, escudo, monasterio, Poblet
escudo, monasterio de Poblet

María de Luna, reina de Aragón, enterrada, monasterio de Poblet


https://es.wikipedia.org/wiki/Cartuja_de_Vall_de_Cristo


  1.  «Gran encilopedia aragonesa». Consultado el 4 de diciembre de 2017.
  2. Brines, Lluís. Biografia documentada de Francesc Eiximenis. Valencia. AVL. 2009. Pp. 191 ss. (en prensa) (en catalán)
  3. Silleras Fernández, Núria (2003). «La piedad urbana de María de Luna, reina de la Corona de Aragón (1396-1406». En Salvador Claramunt Rodríguez (coordinador). El món urbà a la Corona d'Aragó del 1137 als decrets de Nova Planta: XVII Congreso de Historia de la Corona de Aragón. Actas II. pp. 889-894. ISBN 84-475-2740-9.

Tomo I, texto VIII, testamento Rey Martín el Humano, latín


VIII.

Pergaminos de don Martín, n.° 391. 2 de diciembre de 1407.

Hoc est translatum etc. In nomine domini Dei eterni et omnipotentis per quem reges regnant et principes dominantur. Nos Martinus Dei gratia rex Aragonum Valentie Majoricarum Sardinie et Corsice comesque Barchinone Rossilionis et Ceritanie considerantes quod si permissione divina dum sumus in hoc mortali corpore vivimus ad tempus in terris longe magis debemus appetere et regnum in excelsis perpetuum obtinere cum sanctis quodque tanto fortius debemus repentinum introitum pertinere quanto inevitabilis mortis nos instat ambigua certitudo ideo scientes ad regnum celeste predictum non posse ascendere nisi prius corpus nostrum legem naturalem implendo morte redigatur in terram de qua ipsum fore productum nullatenus ignoramus resurrectionis gratia posita renovandum casum fragilitatis humane per anticipatam cautelam dispositionis testamentarie disponimus pervenire dum mentis tranquilitas rationis effectus et temporis aptitudo se offerunt opportuna: igitur Pneumatis almi gratia invocata et nostrorum peccaminum venia suppliciter implorata revocantes expresse et de certa scientia anullantes penitus et cassantes omnia alia quecumque testamenta et codicillos si que et qui et ubicumque et quandocumque per nos facta vel facti usque nunc reperientur salvo et salvis et inde exceptis inferius confirmatis hoc nostrum facemus ordinamus et condimus testamentum in quo voluntas nostra perfecta et completa
et regnorum et terrarum nostrarum ordinatio et dispositio valeat reperiri. - Rex Martinus. - In primis enim Salvatori et redemptori nostro domino Jesuchristo et gloriosissime virgini Marie matri ejus corpus nostrum et animam devota mente et humiliter comendamus. - Rex Martinus. - Et eligimus nostri corporis sepulturam in ecclesia Beate Marie monasterii Populeti cisterciensis ordinis siti in Cathalonia in diocesi Tarracone in qua ferri et construhi volumus per heredem nostrum subscriptum videlicet in quo dicti arcu existente in ecclesia supradicta in parte scilicet vacua dicti archi juxta seu prope cumbam domini regis patris et serenissime domine Elionor matris nostre memorie recolende honorificam tumbam pro nostri corporis sepultura: volumus tamen quod corpus seu ossa nostra sepeliantur juxta seu prope portale quo transitur de ecclesia dicti monasterii Populeti ad claustrum ipsius monasterii videlicet in eodem claustro juxta dictum portale ita quod exeuntes de dicta ecclesia ad claustrum et intrantes de dicto claustro in ecclesiam faciant transitum supra tumulum in quo sepelientur corpus seu ossa nostra predicta in quo quidem tumulo apponi volumus et jubemus unum lapidem sive losa. - Rex Martinus. - Et etiam volumus et mandamus quod si et
quandocumque contigerit nos debitum solvere naturale si decesserimus in diocesi elnensi gerundensi seu vicensi vel barchinonensi si usque ad villam Martorelli inclusive vel aliis locis dicte diocesis Barchinone versus dictum monasterium in simili distantia dicte ville Martorelli corpus nostrum defferatur ad dictam civitatem Barchinone: quod quidem corpus casu predicto sepeliri volumus in sede ipsius civitatis juxta seu prope portale quo transitur de ecclesia dicte sedis ad claustrum ipsius videlicet in eodem claustro juxta seu prope dictum portale ita quod exeuntes de dicta ecclesia ad claustrum et intrantes de dicto claustro in ecclesiam faciant transitum supra tumulum in quo sepelientur corpus seu ossa nostra predicta: in quo quidem tumulo apponi volumus et jubemus unum lapidem sive losa. Si vero decesserimus in civitate predicta volumus corpus nostrum sepeliri ut supra et in utroque casu tradi sub comanda in sede jam dicta: et si decesserimus extra dictam civitatem videlicet in civitate Ilerde vel Dertuse vel in alia villa seu loco extra dictas civitates volumus et ordinamus quod corpus seu ossa predicta defferantur incontinenti ad monasterium supradictum: et si decesserimus in regno Aragonum vel Valentie volumus et ordinamus quod dictum corpus defferatur et tradatur sub comanda si in dicto regno Aragonum ad et in sede civitatis Cesarauguste et si in dicto regno Valentie ad civitatem Valentie in sede videlicet ipsius civitatis: et si extra regna et terram nostram mori nos contingat volumus et ordinamus quod corpus nostrum tradatur ecclesiastice sepulture in ecclesia cathedrali seu majori civitatis ville vel loci ubi nos decesserimus volentes quod ubicumque nos mori contingat corpus nostrum sepeliatur ut est dictum et inibi sub comanda tradatur: etiam volumus quod quanto citius et comode fieri poterit quovismodo obstaculo heredis nostri vel alterius penitus quiescente super quo manumissorum nostrorum conscientias oneramus et nisi hoc fieri faciant cum effectu redundet in suarum periculum animarum corpus nostrum defferatur ad dictum monasterium et in dicta sepultura ut superius est
contentum sepeliatur cum insigniis regalibus prout est fieri assuetum. - Rex Martinus. - Post hec facimus eligimus constituimus et ordinamus certos et speciales manumissores et exequtores hujus nostri testamenti seu ultime voluntatis scilicet primum principalem et majorem manumissorem et exequtorem hujus nostri testamenti serenissimum Martinum filium primogenitum nostrum carissimum regem Sicilie et ducatuum Athenarum et Neopatrie ducem necnon reverendos in Christo patres archiepiscopos Terracone et Cesarauguste episcopos Barchinone Valentie et Majorice abbatem monasterii Populeti priorem Vallis Jesuchristi et abbatem vel priorem Sanctarum reliquiarum ordinis celestinorum capelle regie Barchinone ac fratrem Johannem de Thaust episcopum oscensem confessorem nostrum qui nunc sunt vel pro tempore fuerint nobilem Geraldum Alamanni de Cervilione gubernatorem Cathalonie Egidium Roderici de Lihori
gubernatorem regni Aragonum Petrum Sancii de Catlatajub majordomum Petrum Torrelles Galcerandum de Sanctominato et Raymundum Torrelles milites camerlengos et Raymundum de Muro bajulum generalem regni Aragonum Sperantem in Deo Cardona vicecancelarium Petrum Darters magistrum rationalem et Johannem de Plano thesaurarium consiliarios nostros si tunc vixerint et si non vixerint alios qui fuerint tunc vicecancellarius magister rationalis et thesaurarius nostri. - Rex Martinus. - Quibus quidem manumissoribus et exequtoribus plenariam conferimus potestatem quod omnes seu major eorum vel tres ex ipsis quorum unus sit dictus rex si vixerit et interesse potuerit et alius ille quem ipse rex elegerit et alius archiepiscopus Terracone cum quibus sint semper dicti prior Vallis Jesuchristi et abbas seu prior Sanctarum reliquiarum vel eorum substituti ac Petrus Torrelles et Johannes de Plano thesaurarius casu quo alii interesse seu intendere non potuerint seu nequiverint quibus certam conferimus potestatem ut inferius continetur presens nostrum testamentum et ordinationem nostram compleant et exequantur absque eorum damno de bonis nostris prout supra et infra invenerint ordinatum. - Rex Martinus. - In primis igitur ordinamus quod dicti nostri manumissores seu exequtores vel tres ex ipsis casu quo alii ut superius continetur interesse seu intendere non potuerint seu nequiverint exequtioni hujus nostri testamenti in quibus sit semper dictus rex si vixerit et interesse potuerit et dicti prior Vallis Jesuchristi abbas seu prior Sanctarum reliquiarum et Petrus Torrelles ac Johannes de Plano incontinenti post obitum nostrum petant et exhigant omnia jocalia res et bona nostra quecumque mobilia et se moventia fructus redditus et proventus et quelibet etiam alia bona nostra quecumque que in posse nostro et aliorum quorumcumque tam domesticorum nostrorum quam aliorum ac quarumlibet personarum secularium et religiosarum seu in aliis quibusvis locis reppererint et de bonis omnibus mobilibus aut se moventibus supradictis manu publica fieri faciant inventarium: dictique Petrus Torrelles et Johannes de Plano thesaurarius noster si vixerint petant colligant et recipiant aut peti colligi et recipi faciant omnes et singulos fructus redditus et proventus civitatum villarum castrorum terrarum et locorum ac aliorum quorumcumque bonorum nostrorum immobilium predictorum tam in regnis Aragonum Valentie Majoricarum et Cathalonie principatu aut alibi infra nostrum dominium consistentium tantum et tamdiu donec cum alia peccunia que ex rebus mobilibus habebitur et haberi poterit supradicta compleri possit et completa fuerit exequtio hujus nostri testamenti: habeant etiam et recipiant dicti manumissores seu exequtores ad manus suas omnia jocalia nostra predicta vassa aurea et argentea sive deaurata et omnia alia bona nostra mobilia arnesia seu alia quecumque que sint ad usum nostri corporis facta sive alia quecumque necnon vestes et alia quecumque sive sint panni perretum sive lecti que omnia exceptis hiis que in presenti nostro testamento dimittimus filio et heredi nostro subscripto vendant incontinenti post nostrum obitum distrahant et alienent ac tradant plus offerentibus et peccuniam eorum nobis pertinentem infra nostrum dominium aut alibi ubicumque recipiant dicti Petrus Torrelles et Johannes de Plano distribuendam per eos una cum alia peccunia nostra si quam forsan in bonis nostris post nostri obitum repererint ad ordinationem dictorum manumissorum seu exequtorum nostrorum juxta formam eisdem manumissoribus seu exequtoribus per nos in presenti testamento traditam in legatis et aliis piis causis: casu vero quo dicti Petrus Torrelles et Johannes de Plano die obitus nostri non vixerint aut vixerint et obierint antequam hec nostra voluntas completa fuerit cum effectu manumissores nostri predicti qui tunc
fuerint eligant loco ipsorum seu alterius eorum qui obierit alium vel alios qui premissa per nos eis comissa complere valeant cum effectu. Veruntamen quare nobilis Geraldus Alamanni de Cervilione gubernator Cathalonie et Egidius Roderici de Lihori gubernator regni Aragonum circa eorum
officia habeant necessario intendere se vaccare providemus ne ad predicta aliquatenus eligantur. Si vero dictus rex ad opus sui retinere velit jocalia arnesia et alia bona mobilia supradicta in presenti ordinatione contenta hoc facere possit ipso tamen solvente pretium seu extimationem eorum legittimam ad cognitionem dictorum manumissorum seu exequtorum nostrorum. - Rex Martinus. - Et ut hec nostra voluntas citius valeat percompleri volumus et ordinamus quod si heres noster subscriptus infra unum annum post nostri obitum continue sequturum omnia que supra et infra ordinamus compleri non fecerit cum effectu manumissores nostri predicti vendant et distrahant castra villas et loca nostra subscripta seu eorum partem videlicet villana de Exerica cum tota sua tinentia vallem de Uxo et serram Dislidia que per nos fuerunt impignerata et villam de Liria cum eorum juribus universis et totum jus et actionem quod nobis competit in eisdem sicut eis videbitur expedire pro complendis omnibus que supra et infra ordinamus ut superius continetur: quam quidem venditionem faciant illi vel illis personis et pro illo pretio seu pretiis quibus cum emptoribus melius potuerit convenire quarum pretia recipiant dicti Petrus Torrelles et Johannes de Plano ut supra de aliis per nos extitit ordinatum nos enim dictis nostris manumissoribus super predictis omnibus et singulis plenam conferimus potestatem. - Rex Martinus. - Insuper cupientes saluti anime nostre salubriter providere volumus et mandamus quod omnia debita ad que nos tenemur nomine nostro propio tam ratione donationum quitationum debitorum et aliarum quarumlibet rationum sive causarum solvantur et restituantur integre libere et expedite per dictos manumissores nostros de bonis nostris mobilibus et immobilibus de quibus citius solvi poterint et que apparuerint prout nos ad eas et ea restituenda et exsolvenda teneri repererint per instrumenta cartas sive albarana sigillis nostris seu officialium nostrorum aut officiorum dictorum officialium sigillata vel per testes aut alia legittima documenta simpliciter et de plano et sine figura judicii prout forus anime hoc exposcit. - Rex Martinus. - Etiam volumus mandamus et ordinamus quod debita et injurie illustrium predecessorum nostrorum regum Aragonum persolvantur de bonis et redditibus per eos assignatis ad predicta debita et injurias persolvendas et quod solutiones hujusmodi fiant per deputatos ad ea solvenda. - Rex Martinus. - Item volumus et ordinamus quod incontinenti post obitum nostrum ex vassis seu vaxillis nostris argenteis alba dumtaxat et etiam
deaurata quecumque et sub quacumque figura existant ad usum et servicium nostrum assidue deputata tradatur et detur dicto fratri Johanni de Tahust episcopo oscensi confessori nostro si tunc vixerit et si non vixerit alteri tunc confessori nostro vendenda et distribuenda per eum cum dicto rege si interesse potuerit qui in isto et in aliis actibus tangentibus exequtionem hujusmodi testamenti caput esse volumus et majorem et cum archiepiscopo vel episcopo illius diocesis terre nostre in qua nos contingat debitum exsolvere naturale et abbas monasterii Populeti usque ad quantitatem et complementum viginti mille solidorum barchinonensium qui per eos dentur et exsolvantur clericis et religiosis vel aliis capellanis qui infra duos menses post obitum nostrum celebrent et teneantur celebrare missas cum obsequiis et suffragiis in remedium anime nostre et animarum predecessorum nostrorum. Si vero dictus noster primogenitus nollet quod ex dictis vassis seu vaxellis argenteis fieret venditio ita cito sicut per nos ordinatum est sed quod ipsa vaxella penes ipsum remaneret tali casu ipso rege solvente illico dictos viginti mille solidos tunc dicta vaxella remaneat penes eum: sed si forsan dictos viginti mille solidos nollet solvere ad distribuendum in dictis missis tali casu volumus et ordinamus quod dictus confessor noster cum archiepiscopo vel episcopo diocesis terre nostre in qua nos contingat ab humores abduci et cum abbate monasterii nostri Populeti usque ad dictam quantitatem viginti milium solidorum vendere et distrahere valeant et quantitatem eandem distribuere clericis et religiosis aut aliis capellanis ut supra clarius est expressum. - Rex Martinus. - Ceterum recensentes nos a Domino largitore bonorum omnium infinitas et largifluas gratias accepisse ne sibi in gratias ipsas nobis missericorditer facere dignatus est censeamur ingrati libenter ad ea per cultus augeatur divinus ecclesiasticeque cerimonie solemniter fiant dirigimus mentem nostram et ideo deliberavimus volumus et ordinamus quod in capella palatii nostri majoris civitatis Barchinone ponantur et conserventur preciose nostre reliquie subscripte: videlicet certe forme Eucarestie que una cum corporalibus consistunt in quodam auri reliquiario: item preciosissimus sanguis Salvatoris Domini nostri Jesuchristi qui miraculose propter dubium cujusdam presbiteri consecrantis cum abo vivo effectus fuit verus sanguis et etiam crux nostra major aurea in qua major pecia quam habemus de ligno vivifice crucis Domini nostri Jesuchristi est affixa quam beatissimus papa Benedictus nobis existentibus in civitate Avinione ad quam dum veniebamus de regno Sicilie quod divina gratia mediante
adquisivimus pro adibendo eidem reverentiam filialem direximus gressus nostros contulit liberaliter atque dedit. Ponantur etiam et conserventur in ea quedam alia crux quam serenissima domina regina Costantia regina Sicilie uxorque serenissimi domini Petri abavi nostri jamdicte cappelle dimissit quamque serenissimus dominus rex Petrus pater noster memorie recolende margaritis et preciosis gemmis pulxerrime adornavit: item quedam alia crux quam serenissima domina regina mater nostra adornavit margaritis et lapidibus preciosis quamque jam dicte capelle dimissit et quedam pars tunice Domini nostri Jesuchristi qua per mulierem fluxu sanguinis vexatam tacta fuit continuo ab ejus infirmitate curata sicut in Evangelio legitur quamque serenissimus imperator gregorum nomine Emanuel consanguineus noster per suos solemnes embaxatores nobis missit et contulit gratiose: item camisia Domini nostri Jesuchristi et quatuor spine corone que sacratissimo capiti suo fuerunt imposite tempore sue salutifere passionis ac brachium etiam beati Georgii martiris Christi et brachium etiam beati Luce Evangeliste et omnes alie nostre reliquie quas hic volumus pro nominatis habere. - Rex Martinus. - Et ut melius diligentius et solempnius in dicta capella divina officia celebrentur et fiant ad honorem Dei ac beatissime Marie semper virginis matris sue totiusque curie celestis ac in remedium animarum nostri ac parentum et predecessorum nostrorum et eorum qui pro nostro servicio in regno Sicilie naturale debitum exsolverunt et in emendam etiam damnorum tam in personis quam bonis etiam ecclesiasticis per nos et servitores nostros predictos in dicto regno Sicilie vigente guerra factorum et illatorum instituimus et ordinamus in capella nostra predicta tresdecim monachos de ordine celestinorum sub regula beati Benedicti quorum quidem monachorum unus sit abbas seu prior et eo mortuo ille ex monachis qui tunc fuerint vel alius de ordine supradicto qui tunc canonice fuerit electus et confirmatus ut est in aliis similibus monasteriis fieri consuetum sit abbas vel prior monasterii prelibati: instituentes et ordinantes quod dictus abbas vel prior quicumque fuerit nominetur abbas sen prior Sanctarum reliquiarum capelle regie Barchinone. - Rex Martinus. - Volentes firmiter et mandantes quod abbas seu prior et monachi supradicti in capella predicta missas diebus singulis celebrent et divina officia horis diurnis pariter et nocturnis solemniter recitent et in eadem capella intersint personaliter dictis horis: quibusquidem abbati seu priori et monachis septem mille solidos barchinonenses pro eorum provisione annua concedimus atque damus promitentes quod pro predictis septem mille solidis per dictos abbatem seu priorem et monachos annis singulis imperpetuum habendis et percipiendis assignabimus certos nostros redditus quos redimere proposuimus per alodium liberum atque francum volentes quod si ad hec complenda fuerimus modo aliquo impediti manumissores nostri predicti emant in civitate Barchinone vel alibi si eis videbitur expedire census redditus et tributa stabiles et indefectibiles atque certi per alodium liberum atque francum que sufficiant ad septem mille solidos supradictos eorum conscientias super hiis firmiter onerantes. Concedimus etiam atque damus eidem abbati seu priori et monachis partem nobis pertinentem in mensuratico sive cops que colligitur et levatur de bladis que venduntur in civitate Barchinone quam quidem partem Johannes de Junyent mercator Barchinone nostro nomine et pro nobis emit a Michaele de Sena cive Barchinone sic quod dictus abbas sive prior et monachi partem predictam habeant et recipiant imperpetuum prout melius et plenius ad nos competit et expectat. Damus etiam et concedimus dictis abbati seu priori et monachis quemdam ortum nostrum cum ejus pertinentiis et juribus universis situm prope menia civitatis Barchinone loco vocato Camp de Sancta Anna quem ibidem habemus et possidemus titulo emptionis per nos inde facte. - Rex Martinus. - Item volumus et ordinamus quod post obitum nostrum anno quolibet imperpetuum qualibet die jovis sancta sive de la Cena fiat et detur tresdecim pauperibus per succesorem nostrum regem Aragonum et suos eligendis elemosina similis illi que per nos fuit dictis pauperibus dari anno quolibet consueta: in hunc videlicet modum quod abbas vel prior predictus eo modo quo nos facere consuevimus qualibet die jovis sancta abluat atque lavet manus et pedes pauperum predictorum quo facto ipse idem abbas vel prior det cuilibet pauperum predictorum quatuor cannas de canna sive mensura panni honesti coloris pro vestitu et tres palmos panni albi pro caligis et duas cannas panni lini pro camisiis et femoralibus et unum par sotularium necnon etiam cuilibet eorundem medium florennum auri Aragonum pro custuris: volentes et ordinantes quod per manumissores et exequtores predictos emantur quadraginta sex libre tresdecim solidi Barchinone annuales et perpetuales in loco seu locis tutis per alodium liberum atque francum ad ipsorum manumissorum sen exequtorum cognitionem quas quidem quadraginta sex libras et tresdecim solidos anuo quolibet imperpetuum recipiat dictus abbas seu prior quicumque fuerit pro exsolvendis et complendis omnibus supradictis nos enim dictas quadraginta sex libras tresdecim solidos pro complendis predictis nunc pro tunc et tunc pro nunc concedimus ac etiam assignamus abbati seu priori et conventui supradictis. - Rex Martinus. - Insuper etiam ad honorem ejusdem sancte et individue Trinitatis Patris Filii et Spiritus sancti volumus instituimus et ordinamus quod post obitum nostrum die qualibet imperpetuum per abbatem vel priorem predictum et successores suos reficiantur et provideantur tres pauperes in pane vino et companagio ac aliis eis necessariis: quibus quidem pauperibus dictus abbas vel prior aut alius monachus per eum deputandus abluat manus et pedes qualibet die hora sibi melius opportuna: pro predictis vero adimplendis faciendis et exsolvendis volumus et ordinamus quod per nostros manumissores seu exequtores predictos emantur quinquaginta quatuor libre barchinonenses in loco tuto et securo per alodium liberum atque franchum quas nos pro complendis predictis concedimus et assignamus per abbatem vel priorem predictum et successores suos habendos et percipiendos et distribuendos ut supra. - Rex
Martinus. - Item instituimus et ordinamus fieri tria aniversaria solemnia quolibet anuo unum videlicet pro anima nostra eadem die qua dies nostros finierimus et aliud in ebdomada Omnium Sanctorum pro animabus parentum nostrorum quo facto fiat in crastinum aliud pro anima nostra
celebranda in dicta ecclesia monasterii Populeti ubi corpus nostrum ut prefertur sepelietur per monachos fratres et clericos in dicto monasterio residentes qui orent Dominum Deum pro anima nostra et parentum nostrorum et omnium fidelium deffunctorum: et ultra hoc teneantur perfecta missa cujuslibet aniversarii supra tumulum domini regis et domine regine parentum nostrorum et postea supra tumulum nostrum absolutiones facere cum orationibus consuetis: et volumus et ordinamus quod per dictos manumissores seu exequtores emantur viginti quinque libre barchinonenses monete censuales anuales et perpetuales per alodium francum in loco sive locis tutis in nuda tamen perceptione ad ipsorum manumissorum seu exequtorum cognitionem qui eisdem monachis fratribus et clericis annuatim tradantur ad opus pretextu aniversariorum predictorum. - Rex Martinus. - Item volumus et jubemus quod centum Christi pauperes panno albo videlicet de duabus vestibus ipsorum quilibet induantur qui portent singulos brandonos cum corpus seu ossa nostra portabuntur ad sepeliendum in ecclesia monasterii supradicti et quousque corpus seu ossa nostra fuerint recondita in tumulo fiendo in ecclesia supradicta ut superius continetur qui quidem pauperes reficiantur de bonis nostris donec predicta completa fuerint cum effectu. - Rex Martinus. - Item recomendamus dicto nostro primogenito et heredi ac successori nostro universali omnes et singulos officiales nostros et specialiter illos qui pro nostro et ejus servicio in regno Sicilie insudarunt tam illos qui tenent pro nobis officia in domo nostra quam extra exortantes eundem ut filium carissimum et succesorem nostrum quod si officia que tenebunt tempore obitus nostri retinere poterunt comode illos in eis remanere permittat alias quod eos collocet in officiis congruis
unum post alium successive juxta eorum merita ut de impensis nobis et sibi serviciis et que ipsi nostro primogenito impendere poterunt remunerationem condignam reportent. - Rex Martinus. - Ceterum pro sepultura nostra fienda et pro injuriis nostris solvendis et pro aliis legatis per nos factis et ordinatis tam in presenti testamento quam in codicillo vel codicillis nostris ex nunc fiendis contentis et expressatis quinquaginta mille libras barchinonenses monete de terno de bonis nostris accipimus: ad que habenda et recipienda per manumissores nostros predictos et pro complendis et exequendis predictis assignamus de presenti omnia vasa nostra argenti albi et etiam decorati que nostro sunt usui et servicio continue diputata exceptis illis que necessaria fuerint pro viginti mille solidis antedictis quos supra dari mandamus confessori nostro distribuendos pro missis celebrandis ut superius continetur ea scilicet omnia que tempore obitus nostri habebimus et nobis reperta fuerint et omnia jocalia de quibus supra nos ordinamus cujuscumque sint generis vel speciei subscriptis inde exceptis et omnia alia et singula bona nostra mobilia et se moventia que nos habemus et tempore obitus nostri habebimus seu penes nos reperta fuerint. Excipimus tamen preciosas nostras reliquias supradictas quas poni et conservari ordinavimus in dicta capella palatii nostri majoris civitatis Barchinone ut superius continetur. - Rex Martinus. - Si quid vero ex dictis quinquaginta mille libris superfuerit completis omnibus que ordinamus detur et distribuatur per manumissores nostros predictos ob salutem animarum nostri et parentum nostrorum pro captivis redimendis orphanis maritandis et aliis piis causis specialiter in remunerandis servitoribus nostris: et de hoc nostrorum manumissorum conscientias oneramus. Et si predicte quinquaginta libre ad predicta et infrascripta ac alia in codicillis nostris contenta et ad debita et injurias nostras solvendas et alia complenda et persolvenda non sufficerent ad id quod et quantum deffuerit volumus de dictis redditibus et juribus recipi et haberi quousque nostrum testamentum hujusmodi completum fuerit ut superius et inferius ac in nostro seu nostris codicillis ordinatum existat: dantes et concedentes prefatis manumissoribus et exequtoribus nostris plenam et liberam potestatem petendi exhigendi et recipiendi tot de bonis nostris quod sufficiant ad predicta et ea distribuendi et erogandi juxta traditam per nos eis formam pro remedio anime nostre et animarum parentum nostrorum et omnium fidelium defunctorum. - Rex Martinus. - Preterea confirmamus priori et conventui Vallis Jesuchristi donationem per nos factam eisdem de locis de Altura e de les Alcubles sicut et prout in dicta donatione et aliis donationibus et concessionibus per nos dicto monasterio inde factis plenius continetur. - Rex Martinus. - Ceterum assignamus operi dicti monasterii ultra alias assignationes per nos jam factas operi supradicto mille florennos auri de Aragonia de et super redditibus nostris civitatis Xative et ejus termini habendos et percipiendos per priorem monasterii predicti seu ejus procuratorem anno quolibet per annos computandos a die obitus serenissime domine regine Cipri cui duos mille florennos dum vitam duxerit in humanis super dictis redditibus jam providerimus assignandos ita quod infra dictum tempus dictum opus habere valeat … mille florennos non ultra de redditibus supradictis. - Rex Martinus. - Et quia multum cordi gerimus ut opus dicti monasterii perficiatur heredem nostrum subscriptum monemus et in Domino exortamur quod ipsum opus mora quacumque cessante si nobis viventibus perfici non poterit habeat taliter recomendatum quod ipsum quam citius poterit perfici faciat cum effectu ejus conscientiam super hiis quantum possumus onerantes. - Rex Martinus - Item volumus et ordinamus quod dicti nostri manumissores qui in hujusmodi nostra exequtione laboraverint et alii habeant salarium quod per dictum regem taxatum et ordinatum fuerit eorum cuilibet fore persolvendum. - Rex Martinus. - Item dimittimus seu legamus egregio Frederico filio naturali dicti regis Sicilie nepoti nostro sive net villas castra et loca nostra Dalcoy de Elxio e de Criullen et vallem de Seta e de Tranadell sita in regno Valentiecum eorum redditibus et juribus universis ac mero et mixto imperio et omnimoda jurisdictione alta et baxia et jus redimendi ea que per nos impignerata fuerunt mediantibus gratie instrumentis. Predicta autem ei legamus in feudum honoratum et sub conditione quod si dictus Fredericus decesserit quandocumque sine liberis masculis de legittimo et carnali matrimonio procreatis vel succedentes eidem unus post alium obierint sine filiis masculis de legittimo et carnali matrimonio procreatis predicta omnia heredi nostro universali et suis successoribus revertantur: et sub conditione etiam quod non possit gaudere aliquibus donationibus per nos ei factis sub quacumque forma verborum sint comprehense quod si fecerit careat omnino legato predicto. - Rex Martinus. - Ceterum dimittimus sive legamus egregie Yolanti filie naturali dicti regis Sicilie primogeniti nostri carissimi triginta mille florenos auri de Aragonia qui sibi dentur et exsolvantur per heredem nostrum predictum cum fuerit in matrimonio collocanda. - Rex Martinus. - Insuper si die obitus nostri dimisserimus filium masculum de legittimo et carnalio matrimonio natum vel nasciturum ultra dictum illustrem Martinum regem Sicilie primogenitum nostrum dimittimus eidem jure institutionis et pro parte hereditatis et legittima ac alio jure quocumque in bonis nostris sibi pertinentibus comitatum Impuriarum cum suis redditibus juribus et pertinentiis universis ac mero et mixto imperio et omnimoda jurisdictione alta et baxia in feudum tamen honoratum et sub conditione quod si dictus filius noster decesserit quandocumquc sine liberis masculis de legittimo et carnali matrimonio procreatis vel succedentes eidem unum post alium obierint sine filiis masculis de legittimo et carnali matrimonio procreatis comitatum predictum heredi nostro universali et suis successoribus integre revertatur: si vero dimisserimus duos filios masculos dimittimus secundo natu in feudum tamen honoratum et sub conditione predicta marchionatum nostrum situm in diocesi urgellensi et villas nostras de Tarrega et de Vilagrassa de Sabadello et de Tarracia de Calidis de Montebovino (Caldes de Mont boví : Montbui) et de Granullariis (Granollers) cum eorum redditibus juribus et pertinentiis universis ac mero et mixto imperio et omni jurisdictione alta et baxia que omnia per nos vendita et impignerata fuerunt mediantibus gratie instrumentis: et propterea volumus quod dictus rex primogenitus noster subscriptus ea omnia que demittimus secundo natu filio nostro quitare et desobligare habeat et teneatur ab his quibus vendita seu impignerata fuerunt necnon et ab oneribus quibuscumque per nos aut nostros predecessores imposita super eis dictarum gratiarum intervenientibus instrumentis: et si plures filios dimisserimus dimittimus cuilibet eorum jure institutionis centum mille florenos auri de Aragonia: si vero die obitus nostri dimisserimus filiam natam vel nascituram qui tunc non fuerit in matrimonio vel in ordine religionis collocata dimittimus eidem jure institutionis centum mille florenos dicti auri: si autem fuerint due filie in matrimonio vel ordine religionis non collocate silicet ambe vel altera ipsarum tunc dimittimus eisdem jure institutionis dictos centum mille florenos inter ambas equaliter dividendos si uterque fuerit in matrimonio collocanda alios dictos centum mille florenos dimittimus illi que maritanda erit et jam maritate seu maritatis dimittimus jure institutionis cuilibet ipsarum mille florennos auri de Aragonia in quibus et in eo quod eis dederimus earum tempore matrimonii ipsas nobis heredes instituimus. - Rex Martinus. - Item relinquimus liberos et alforros seu francos et ab omni servitute quitos et exemptos omnes et singulos servos seu sclavos et captivos nostros quos habebimus tempore mortis nostre. - Rex Martinus. - Demum instituimus heredem nostrum universalem in regnis et terris nostris Aragonum Valentie Majoricarum Sardinie et Corsice ac comitatibus Barchinone Rossilionis et Ceritanie et terris eis adjacentibus que nos hodie (ho + die: hui, huy, vui, vuy, avui) habemus seu que pro nobis tenentur seu teneri debent nunc et in futurum necnon in regno Sicilie ac ducatu Athenarum et Neopatrie et in ducatu etiam Tarantane et comitatu Turolii in Alamannica cum militibus et dominabus et aliis hominibus et feminis ac aliis universis bonis nostris juribus et actionibus nobis nunc vel in futurum pertinentibus et spectantibus tam in predictis quam alibi quocumque modo et forma serenissimum Martinum regem Sicilie Athenarum et Neopatrie ducem primogenitum nostrum carissimum predictum. - Rex Martinus. - Et si dictus rex Martinus filius et primogenitus noster carissimus heres non erit vel erit et decesserit quandocumque substituimus ei et nobis heredem instituimus in dictis regnis et terris juribus et aliis superius expressatis filium ejus primogenitum masculum legittimum et de legittimo et carnali matrimonio procreatum: et si dictus ejus primogenitus heres non erit vel erit et obierit quandocumque sino liberis masculis de legittimo et carnali matrimonio procreatis eo casu substituimus universalem illum ex liberis et nobis heredem instituimus universalem illum ex liberis dicti nostri primogeniti masculum legittimum et de carnali matrimonio procreatum qui tunc vixerit majorem natu et sic per ordinem unum post alium secundum ordinem geniture. - Rex Martinus. - Si vero dictus rex Martinus filius et primogenitus noster carissimus obierit quandocumque sine liberis masculis de legittimo et carnali matrimonio procreatis eo casu substituimus eidem et nobis heredem instituimus universalem illum ex liberis nostris masculum legittimum et de carnali matrimonio procreatum si et qui immediate major natu erit post dictum illustrem regem Martinum filium et primogenitum nostrum carissimum et sic successive unum post alium ex liberis nostris si quos nos habere contingerit in futurum secundum ordinem geniture. - Rex Martinus. - Hec est ultima voluntas nostra quam valere volumus jure testamenti et si non valet jure
testamenti valere volumus jure codicillorum aut cujuslibet alterius ultime voluntatis. - REX MARTINUS. - Actum est hoc in monasterio Vallis Jesuchristi secundo die decembris anno a nativitate Domini millessimo CCCCmo septimo. (2 de diciembre de 1407)